Indiana Fever enfrenta un nuevo desafío en su temporada con problemas defensivos persistentes y la vuelta de Caitlin Clark.
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El inicio de la temporada está siendo una pesadilla para las Indiana Fever. Tras un año que prometía progreso, el equipo se encuentra nuevamente atrapado en sus luchas habituales. Con un récord que muestra cinco derrotas, la llegada inminente de Caitlin Clark ha generado un halo de esperanza, pero los problemas parecen ser más profundos que la ausencia de una sola jugadora.
Resultados que no reflejan el esfuerzo
La última temporada trajo consigo el mejor total de victorias para las Fever desde 2016, además de un notable tercer puesto en eficiencia ofensiva con un rating de 104.2. Sin embargo, la defensa ha sido un talón de Aquiles constante.
A pesar de los esfuerzos por mejorar, el equipo ha mantenido posiciones entre los peores en defensa en la WNBA, un patrón que persiste desde hace años.
Movimientos audaces en la oficina
Con el objetivo de revertir esta tendencia, la gerencia realizó cambios significativos durante la temporada baja. La incorporación de DeWanna Bonner y Natasha Howard, ambas con trayectorias defensivas destacadas, se planteó como una solución para equilibrar el rendimiento en la cancha. La pregunta que surge es si este plantel fue realmente diseñado para funcionar sin Clark.
La lucha por la identidad
En un episodio reciente de Locked on Women’s Basketball, Chelsea Leite planteó esta inquietud al reportero de las Fever, Tony East. «Definitivamente han construido un equipo que se alinea con las fortalezas de Caitlin», comentó East. Pero añadió que los nuevos fichajes, aunque defensivamente sólidos, no encajan perfectamente en la ofensiva.
Mejoras estadísticas, pero sin victorias
Las cifras sugieren que las Fever están progresando en defensa. Con un rating defensivo de 95.2, solo están detrás de las New York Liberty, lo cual es un avance notable tras años de estar en las últimas posiciones. Sin embargo, estas mejoras no se han traducido en victorias. La única actuación sobresaliente fue en el partido inaugural, donde lograron una aplastante victoria por 30 puntos, pero no pudieron mantener el impulso.
El enfoque de Briann January
Briann January, quien se destacó por su tenacidad defensiva durante su carrera, ha adoptado un enfoque directo para infundir carácter en el equipo. Según Clark, esto ya ha comenzado a cambiar la mentalidad del grupo. «Bri nos ha retado a ser más físicos, a estar más cerca de nuestras rivales», expresó.
La falta de cohesión
A pesar de contar con jugadoras experimentadas como Bonner, Howard, Sophie Cunningham y Jordin Canada, Indiana no ha logrado establecer una defensa cohesiva. La falta de coordinación y la inconsistencia en la ejecución son evidentes, dejando al equipo en una encrucijada. ¿Podrán encontrar la fórmula que les permita no solo competir, sino también ganar?
