El cornerback Kris Boyd se encuentra en estado crítico tras sufrir un disparo durante un altercado en Manhattan.

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Un suceso trágico ha sacudido a la comunidad deportiva: el jugador de los New York Jets, Kris Boyd, fue víctima de un tiroteo en Midtown Manhattan en las primeras horas del domingo. A sus 29 años, Boyd recibió un disparo en el abdomen y, aunque su estado es crítico, se encuentra estable en el Hospital Bellevue.
La policía de Nueva York (NYPD) ha confirmado que el incidente ocurrió alrededor de las 2 a.m. cerca del restaurante Sei Less, conocido por ser un punto de encuentro para celebridades. Testigos relataron que una discusión entre varias personas escaló rápidamente hacia la violencia, resultando en disparos.
Aunque la policía no ha revelado la identidad de la víctima, fuentes cercanas han corroborado que se trata de Boyd.
Detalles del incidente
Según los informes, el altercado que desembocó en el tiroteo tuvo lugar en una zona reconocida por su animada vida nocturna. Este hecho ha suscitado una creciente preocupación sobre la seguridad en el área. Tras el ataque, el tirador se dio a la fuga en un vehículo SUV de la marca BMW. Además, se observó un segundo automóvil, un Mercedes-Maybach, abandonando la escena rápidamente. Las autoridades están revisando las grabaciones de las cámaras de seguridad para recabar más información sobre los sospechosos.
Reacción de la comunidad y del equipo
La organización de los New York Jets ha emitido una declaración breve en la que reconoce la situación y ha decidido no ofrecer más comentarios en este momento. Esta noticia ha desatado una ola de apoyo y solidaridad tanto de los fanáticos como de otros jugadores de la NFL, quienes han expresado su preocupación por el bienestar de Boyd.
Este trágico suceso se suma a una serie de pérdidas que han marcado a la franquicia de los Jets en lo que va de la temporada. En octubre, el exjugador Nick Mangold falleció a los 41 años. Más recientemente, el joven jugador Marshawn Kneeland, amigo cercano de varios integrantes del equipo, también perdió la vida a la edad de 24 años.
Trayectoria de Kris Boyd en el fútbol americano
Kris Boyd ha dejado una marca significativa en el mundo del fútbol americano, a pesar de las adversidades personales que ha enfrentado. Su carrera, que comenzó con la selección en la séptima ronda del draft de 2019, lo llevó a ser parte de equipos como los Minnesota Vikings, Arizona Cardinals y Houston Texans. En marzo, Boyd se unió a los Jets, donde se ha consolidado como un jugador valioso en equipos especiales y un recurso clave en la secundaria del equipo.
Superando la adversidad
El camino de Boyd hacia la NFL ha estado lleno de desafíos. Durante su etapa universitaria en Texas, compartió abiertamente la pérdida de su padre y su abuela. Estas experiencias trágicas lo motivaron a mantener una perspectiva positiva en su trayectoria en el fútbol americano. Boyd ha subrayado en numerosas ocasiones la importancia de valorar cada momento, asegurando que su sonrisa refleja el hecho de que está viviendo un sueño que muchos no logran alcanzar.
En cuanto a su situación actual, Boyd se encontraba en la lista de reserva debido a lesiones antes del incidente, lo que significa que aún no había tenido la oportunidad de jugar en la temporada. Su contrato con los Jets, valorado en 1.6 millones de dólares, lo posiciona como uno de los defensores más experimentados del equipo, aunque su tiempo en Nueva York ha estado marcado por las dificultades derivadas de las lesiones.
Investigación en curso y esperanzas de recuperación
La policía continúa su labor investigativa tras el tiroteo, sin que hasta el momento se hayan efectuado arrestos. La reticencia de algunos testigos a brindar información ha complicado el avance del caso, generando incertidumbre sobre la captura del responsable. En este contexto, la comunidad y los aficionados mantienen la esperanza de que Kris Boyd logre superar este difícil momento, confiando en su fortaleza y capacidad para enfrentar desafíos.
El tiroteo que involucró a Boyd no solo representa un reto personal para el jugador, sino que también pone de relieve una dura realidad sobre la violencia armada que afecta a la sociedad. La familia de Boyd, sus compañeros de equipo y los aficionados se encuentran unidos en su deseo de una pronta recuperación.




