En medio de una creciente tensión, la cumbre entre España y Marruecos se realiza sin la prensa, buscando esquivar el delicado tema del Sáhara Occidental.

Temas cubiertos
En Madrid, se ha convocado la XIII Reunión de Alto Nivel (RAN) entre España y Marruecos, un evento que promete ser significativo para ambas naciones. Este encuentro, programado para mañana, no contará con la presencia de periodistas, lo que ha suscitado diversas especulaciones sobre las verdaderas intenciones del Gobierno español.
Según fuentes cercanas al Ejecutivo, esta decisión busca evitar las incómodas preguntas relacionadas con el Sáhara Occidental, un tema delicado en las relaciones bilaterales.
La RAN tiene como objetivo consolidar lo que ambos países definen como una relación moderna y global.
Ambos gobiernos destacan los vínculos humanos y comerciales que los unen, con un intercambio que alcanzó los 22.600 millones de euros en. Además, se ha llevado a cabo un foro empresarial que refuerza esta unión, evidenciando el deseo de Madrid y Rabat de proyectar una imagen de colaboración.
Acuerdos y expectativas de la cumbre
En la reunión, el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, estará acompañado por varios ministros y se espera la firma de múltiples acuerdos. Estos abarcan desde la digitalización de administraciones hasta la cooperación en áreas como agricultura, educación y prevención de desastres naturales. Sin embargo, el silencio mediático en torno a la reunión deja en el aire muchas preguntas sobre lo que realmente se discutirá.
La delicada situación del Sáhara Occidental
El trasfondo de esta cumbre es el Sáhara Occidental, un tema que ha generado tensiones históricas. En la reunión anterior, celebrada en febrero de en Rabat, hubo un intercambio abierto entre Sánchez y su homólogo marroquí. Sin embargo, en esta ocasión, la falta de una comparecencia ante los medios ha sido notable, lo que ha llevado a críticos a cuestionar la libertad de prensa en España, un país que hasta ahora se ha jactado de sus estándares democráticos.
Un analista consultado ha expresado su preocupación por la postura de España, sugiriendo que este tipo de reuniones podrían ser vistas como un signo de debilidad ante Marruecos, que parece estar aprovechando su momento de influencia diplomática. Hay temores de que Marruecos intente forzar a España a un reconocimiento más explícito de su soberanía sobre el Sáhara, lo que podría complicar aún más la situación en la región.
Contexto internacional y relaciones económicas
La situación se complica aún más con el reciente respaldo de la ONU a la propuesta marroquí de autonomía en el Sáhara, un movimiento que Rabat ha celebrado como un triunfo diplomático. Sin embargo, este respaldo no implica un reconocimiento directo de la soberanía marroquí sobre el territorio, lo que deja a España en una posición incómoda, especialmente considerando su histórico apoyo a la autodeterminación saharaui.
Impacto en la economía y la migración
A pesar de las tensiones políticas, las relaciones económicas entre España y Marruecos han florecido. España se ha convertido en el principal socio comercial de Marruecos, con un significativo aumento en las exportaciones. Además, la cooperación en la lucha contra la inmigración irregular ha llevado a una notable disminución de llegadas a las costas canarias, lo que representa un área de éxito para ambas naciones.
A medida que se desarrolla esta cumbre, es evidente que el diálogo entre ambos países se encuentra en un punto crítico. Con la atención mundial centrada en la situación del Sáhara Occidental, la falta de transparencia en las negociaciones puede generar más desconfianza y complicar la relación bilateral.




