El Congreso se prepara para una sesión plenaria crucial que podría definir el futuro de la gestión gubernamental antes de un extenso receso.

Temas cubiertos
En la recta final del año, el Gobierno español se prepara para enfrentar una sesión plenaria que podría impactar significativamente su estabilidad política. Con la vista puesta en las vacaciones parlamentarias que comenzarán en febrero, el Ejecutivo busca cerrar varios asuntos pendientes durante esta última semana de actividad legislativa.
Entre los temas destacados se encuentran la validación de tres decretos y la aprobación de una ley de atención al cliente, que ha suscitado intensos debates.
El Congreso de los Diputados se reunirá entre el martes y el jueves, siendo este último día clave para la actividad legislativa.
Sin embargo, los ministros del Gobierno se enfrentarán a un clima de tensión debido a las preguntas que surgirán en torno a casos de corrupción que involucran al PSOE, así como acusaciones de comportamientos inapropiados contra un exalto cargo del Gabinete. La sesión de control al Gobierno del miércoles promete ser un evento candente.
Iniciativas del Gobierno en la última sesión
El jueves, el foco estará en la votación de la ruta de estabilidad presupuestaria, que ya fue rechazada hace dos semanas. Junts, el partido independentista catalán, ha manifestado su intención de volver a oponerse a esta propuesta, lo que augura una nueva derrota para el Gobierno. A pesar de ello, la administración de Pedro Sánchez confía en poder presentar los Presupuestos Generales del Estado para 2026, aunque se basa en la senda de gasto de 2025, la última que recibió luz verde.
Reacciones y expectativas
La situación es complicada, ya que Junts ha dejado claro que su rechazo a la ruta presupuestaria marcará el tono de las negociaciones futuras. El líder de Junts, Carles Puigdemont, ha advertido que está decidido a derribar los presupuestos incluso antes de que se analicen, lo que resalta la fragilidad de la situación política actual.
Por otro lado, el Congreso también se pronunciará sobre otras leyes en diferentes etapas de su proceso legislativo, como la ley de atención a la clientela. Esta norma, que restringe la obligación de las empresas de atender en lenguas cooficiales, ha generado un gran interés, especialmente entre los grupos políticos que buscan asegurar su aprobación.
Decretos en revisión y su impacto político
Además de las leyes, el pleno del jueves incluirá la discusión sobre la continuidad de tres decretos importantes: uno relacionado con las ayudas a los afectados por la erupción del volcán de La Palma, otro que contempla un aumento salarial del 2.5% para los funcionarios en 2025, y el tercero que amplía el margen de inversión de los ayuntamientos. Es probable que la oposición no se oponga a los primeros dos decretos, pero el tercero es un tema delicado dado que fue impulsado para recuperar el favor de Junts.
Desafíos en la negociación con Junts
La aprobación de este último decreto podría ser vista como un intento del Gobierno de acercarse a los independentistas. Sin embargo, cualquier deserción en la alianza del Gobierno podría comprometer su éxito. A pesar de las tensiones, el Ejecutivo espera lograr la aprobación de estas medidas si logra mantener la unidad entre sus socios.
Finalmente, el Congreso también discutirá las enmiendas a la reforma de la ley de dependencia, que busca ampliar los servicios para personas dependientes. Sin embargo, Junts y el PNV han presentado enmiendas con la intención de paralizar el avance de esta legislación, lo que añade otra capa de complejidad a la situación política del Gobierno.
La última sesión del Congreso antes del receso se perfila como un evento clave que podría determinar la dirección futura del Gobierno y su capacidad para gestionar las relaciones con sus aliados y la oposición.




