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Encuentran muerto al rapero Abdel Bary en una prisión española

Así era el exrapero Abdel Bary, encontrado sin vida en su celda en una prisión española, donde estaba acusado de terrorismo yihadista.

Así era el exrapero Abdel Bary, encontrado sin vida en su celda en una prisión española, donde estaba acusado de montar una célula de Estado Islámico en España.

¿Quién era Abdel Bary?

Abdel Bary era un exrapero británico de origen egipcio, conocido como L.

Jinny, acusado de cargos de terrorismo yihadista.

Abdel Bary llegó a España en 2020, a bordo de una patera procedente de Argelia.

Fue detenido inmediatamente por la policía debido a la «amenaza a la seguridad nacional» que suponía su regreso de Siria, según indicó el fiscal durante el juicio.

Interpol advirtió a la Policía española sobre su llegada, lo que propició su detención en abril de 2020 en Almería en plena pandemia de coronavirus.

Formó parte del grupo de combatientes británicos apodado ‘Los Beatles’

Muerte en prisión

Abdel Bary, a quien la Audiencia Nacional juzgaba por presuntamente liderar una célula de Estado Islámico (EI) en España, muere el 26 de Junio de 2023 en extrañas condiciones.

De acuerdo a información obtenida, Bary estaba en solitario en su celda. Se encontraba en el módulo de aislamiento de la prisión Puerto III en Cádiz.

Según fuentes penitenciarias, se desconocen por el momento las causas de su muerte.

Abdel Bary no mostraba indicios de violencia, dejando en incertidumbre si su fallecimiento fue producto de un suicidio.

Esto través de la ingesta de algún agente o si experimentó un colapso repentino.

La administración de la prisión ha informado al juzgado de guardia, que abrirá una investigación para determinar las circunstancias de su fallecimiento.

Paralelamente, Instituciones Penitenciarias también llevará a cabo una investigación interna.

Se realizará una autopsia al cuerpo de Bary para esclarecer las causas de su muerte.

Cargos y conclusiones del juicio

Durante el juicio, el Ministerio Público mencionó que ya existían alertas de terrorismo relacionadas con él en el Reino Unido.

Aseguró que había informes de Europol y que había viajado desde Turquía a Siria «para proteger el camino de Alá».

Adicionalmente, la Fiscalía enfatizó que después de su llegada a dicho país en 2013, se mantuvo un seguimiento en redes sociales de su actividad, destacando que en 2017, publicó una imagen donde posaba con una cabeza decapitada.

El Ministerio Público mantuvo su petición de nueve años de prisión para Bary y de siete y ocho años para los otros dos acusados con los que fue detenido.

Los tres fueron acusados de formar una célula yihadista. Esta dedicada a cometer fraudes bancarios en internet y a negociar con criptomonedas para financiar sus actividades terroristas.

El fiscal defendió la actuación policial, que ha sido cuestionada por las defensas, y sostuvo que la detención se realizó con carácter de urgencia ante la sospecha de que Bary había sido combatiente del Estado Islámico en Siria.


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