Un simple gesto al despertar puede transformar tu salud bucal.
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Ane Gastesi, una reconocida odontóloga, lanza una alerta sobre un error común que muchos cometen al comenzar su día: beber agua sin antes limpiar adecuadamente la boca. Aunque es fundamental hidratarse, hay un paso previo que no debe pasarse por alto.
Un peligro oculto al despertar
Durante el sueño, el cuerpo lleva a cabo un proceso natural de desintoxicación, lo que provoca la acumulación de bacterias y toxinas en la lengua. Esa capa blanquecina que vemos al despertar no es inofensiva; alberga residuos del organismo que, si no se eliminan, pueden reabsorberse con el agua o alimentos que ingerimos.
“Durante la noche nuestro organismo se detoxifica”, explica Gastesi, enfatizando la necesidad de despejar la lengua antes de cualquier ingesta.
La limpieza de la lengua: un hábito necesario
La especialista sugiere una acción sencilla pero crucial: limpiar la lengua con un cepillo o raspador. “Puedes usar un cepillo específico o un raspador lingual”, señala. Esta práctica no solo es fácil de implementar, sino que apenas toma tiempo. “Es un hábito que no te llevará más de tres segundos al día”, asegura. A pesar de su brevedad, sus efectos son notables: una lengua limpia ayuda a prevenir el mal aliento, mejora el sentido del gusto y reduce la carga bacteriana en la boca.
Un cambio significativo en la salud oral
“Va a suponer un cambio en tu salud”, concluye la profesional, animando a todos a incluir este cuidado en su rutina diaria. La limpieza de la lengua no debe ser vista como un extra, sino como parte esencial del cuidado bucal, al igual que cepillarse los dientes o usar hilo dental. A pesar de su relevancia, la lengua sigue siendo uno de los elementos más descuidados en la higiene bucal.
Hacia una mejor salud oral
Incorporar la limpieza de la lengua en los primeros momentos del día puede marcar una diferencia significativa para la salud general. Este consejo se alinea con una tendencia creciente hacia la atención integral de la boca, recordando que una buena salud oral comienza mucho antes de tomar el primer sorbo de agua. ¿Te atreves a cambiar tu rutina matutina y darle a tu lengua el cuidado que merece?
