Una madre asesina a su familia tras envenenarles con setas. Las autoridades australianas advierten que la especie llamada hongo de la muerte puede confundirse con hongos comestibles.
Hace dos semanas, cinco adultos y dos niños se sentaron a comer setas en familia en un pequeño pueblo en Australia.
Una semana después, tres adultos estaban muertos, una cuarta persona luchaba por su vida y la quinta era investigada por envenenar potencialmente a sus invitados con hongos silvestres.
La mujer de 48 años que preparó el almuerzo asegura que no tiene idea de lo que pasó.
Amaba a su familia y no le haría daño. El caso conmocionó a los australianos, desconcertó a la policía y sacudió a una comunidad muy unida.
La inusual historia comenzó cuando Gail y Don Patterson fueron a almorzar con sus nietos a la casa de su nuera Erin Patterson en Leongatha, al sureste de Melbourne.
Un hombre de origen irakí mata a tiros a doce miembros de su familia y luego decide quitarse la vida. Todo comenzó tras una discusión financiera.
"Rina Arano fue atada a un árbol sin ropa y lleva muerta casi dos semanas... Todavía estamos tratando de determinar la causa de la muerte".