Argentina se enfrenta a un grave desabastecimiento histórico de gasolina y Diesel; muchos expertos culpan al control de precios del gobierno peronista.
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Argentina, un importante productor de petróleo y gas de esquisto, está sufriendo una escasez histórica de gasolina y diésel. Algo inédito en el país.
Argentina sin gasolina
Argentina sufre un grave problema de desabastecimiento de combustible en los últimos días.
Algo inédito en el país, a imagen y semejanza de lo que años atrás sufrió también Venezuela.
Conseguir gasolina se ha convertido en toda una odisea.
Desde el día lunes, hay filas en todas las estaciones de servicio, en especial en las de la petrolera estatal YPF, que ofrece los precios más económicos.
A unas semanas de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales, los argentinos encuentran las gasolineras vacías.
Una situación que muchos atribuyen al ministro de Economía y candidato, Sergio Massa.
¿Cómo puede ser que un país rico en petróleo y refino se quede sin gasolina para sus ciudadanos?
El dilema del barril criollo: el precio local Vs el internacional.
Oficialmente, las empresas petroleras y las estaciones de servicios, atribuyen esta situación a problemas internos de refino y a la falta de dólares; para importar componentes clave para su elaboración.
Sin embargo, muchos expertos culpan al control de precios del Gobierno peronista.
Con un precio local para el barril de petróleo fijado en 56 dólares, muy por debajo del precio internacional de 86 dólares, los productores optan por exportar, dejando a Argentina sin combustible.
Medidas del gobierno
Frente a la crisis, el Gobierno decidió congelar el precio de la gasolina hasta el 31 de octubre y mantener los combustibles en el programa ‘Precios Justos’.
Esta situación llevó a los argentinos a comprar en grandes cantidades, agudizando el desabastecimiento.
Durante el fin de semana, el ministro de Economía, Massa, instó a las petroleras a resolver la crisis o enfrentar una paralización de las exportaciones.
Finalmente, el 27 de octubre, la secretaria de Energía, Flavia Royon, logró un acuerdo para importar 10 buques cisterna con suministros, poniendo de manifiesto la paradoja de que, mientras Argentina exporta petróleo, tiene que importar crudo por las políticas de precios impuestas.
