La industria del motor tiene más de cien años, eso significa que el negocio está estudiado por todas partes al dedillo. Así, los cerebros pensantes de marcas como GM y Nissan se han puesto ya a pensar qué pasará cuando tras unos años de uso intensivo, las baterías de nuestros coches eléctricos hayan perdido su capacidad y decidamos sustituirlas por unas nuevas.
El litio y todos los componentes puede recuperarse pero quizá resulte mejor darle un nuevo uso a toda la pila…La idea es emplearlas para todo tipo de cometidos como en máquinas de vending, torres de repetición para teléfonos móviles, oficinas personales en las viviendas, ordenadores, ascensores o, incluso, servir de acumuladores conectados en línea en el subsuelo de los gigantescos campos eólicos.
Cuando los molinos de viento funcionaran por la noche sin demanda, la electricidad podría almacenarse debajo de ellos.Mitsubishi i-MiEVEl Leaf, primer coche electrico globalEl potencial de este tipo de nueva industria de lo usado puede ser enorme porque hay que tener en cuenta que a partir de 2020 cada año habrá cientos de miles de baterías de coche usadas para gestionar. Hacerlo desde la perspectiva de la reutilización nos da una idea de lo mucho que esta última crisis ha removido los cimientos de la industria del automóvil. Si quieres leer más sobre Ecología, entra aquí.Concepto eléctrico Geely – Salón de Pekín 2010Vía Autobloggreen
