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El principal y único acusado por el asesinato de Laura Luelmo, Bernardo Montoya, reconoce que trasportó su cuerpo, pero insiste en que no la violó ni la mató.
Bernardo Montoya, el único acusado por la agresión sexual y asesinato de la joven zamorana Laura Luelmo, reconoce «sin comas ni sombras» haber transportado su cuerpo y haber usado una manta para cubrirlo, según ha indicado este jueves su abogado, Miguel Rivera.
El acusado por el asesinato de la joven en Nerva, Huelva, sigue insistiendo en que es inocente de su asesinato. Señala así a una expareja, que quedó excluida de la causa.
Según explicaciones del propio abogado, Bernardo Montoya «usó la manta para cubrir el cuerpo y transportarlo», entendiendo que puede ser en ese momento cuando se transfieren sus restos biológicos al cuerpo de ella.
Rivera ha incidido en que lo que quedó claro ayer con la pericial de los forenses es que «no había semen en el cuerpo, solo restos biológicos y estos, a nuestro juicio, son confusos, pueden tener cualquier procedencia y no necesariamente hacen suponer de manera indubitada que hubo agresión sexual».
«Esa ambigüedad y esa procedencia difusa de los restos encontrados nos abre una puerta a la contradicción y a sostener nuestras tesis, al menos en lo que se refiere a ese aspecto», ha señalado el abogado. Más tarde añade que «el tema de la detención ilegal lo tenemos muy claro, lo que es ese cargo, tenemos bastante claro nuestras posturas».
Montoya podría evitar la prisión permanente revisable, si el tribunal del jurado entiende que no hubo violación, ya que solo es aplicable en casos de agresión sexual con la concurrencia de asesinato.
El abogado sostiene que esto puede «coadyuvar en el tema de la prisión permanente revisable y con lo que hemos conseguido es más que suficiente para ratificar en nuestra postura».
La Audiencia Provincial de Huelva está juzgando a Bernardo Montoya por el asesinato y violación de la joven profesora zamorana, Laura Luelmo, en diciembre de 2018.
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