En Brasil, Sao Paulo, Guilherme llevó su rivalidad jugando al Call of Duty con Ingrid al extremo cuando decidió asesinarla. Ambos se disputaban el liderazgo de las calificaciones y eran los mejores jugadores brasileños pero tenían equipos diferentes.
Ingrid y Guilherme, no se conocían en persona, solo a través del videojuego online y por las redes sociales.
Hace una semana, el hombre de 18 años Guilherme decidió invitarla a su casa que se encontraba al norte de Sao Paolo. A pesar de que Ingrid tenía otras intenciones con su visita, el chico terminó matándola a cuchillazos a sangre fría.
Grabó un video y lo envió por el grupo online a sus colegas.
Los demás usuarios pensaron que era una mentira, pero al ver el video. Donde Ingrid estaba muerta en la vida real y no en Call of Duty. Los mismos amigos que recibieron el archivo por Whatssapp llamaron a la policía y denunciaron lo ocurrido.
«Mira, ¡qué maravilloso!», dice en las imágenes, en las que muestra el cadáver y después se graba a sí mismo reflejado en un espejo.
No conforme, Guilherme, explicó a la policía tras ser detenido que su salud mental estaba bien y que asesinó a Ingrid «porque quería».
Para reivindicarse que estaba bien lo que hizo. Informó a los agentes que había dejado un manifiesto de 52 páginas . En este se leen mensajes de incitación al terrorismo y pruebas de que tenía todo pensado desde hace semanas.
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"Rina Arano fue atada a un árbol sin ropa y lleva muerta casi dos semanas... Todavía estamos tratando de determinar la causa de la muerte".
Esta amable Policía tenía un gran corazón, se bajó del coche, se sentó junto a un indigente y desayuna con él en Estados Unidos.