El otro día hablando del hotel V8 de Stuttgart, os comenté que allí habría una serie de actos para celebrar el 125 aniversario del registro de la patente del primer automóvil realizada por Gotilieb Daimler.
El fundador de Mercedes tenía no muy lejos de allí, en Caanstatt un pequeño invernadero en el que creó poco después el prototipo.
Con él habría de recorrer su hijo Adolph los tres kilómetros que separan el barrio de otro lugar emblemático en la historia de Mercedes, Untertürkheim.
El vehículo registrado conjuntamente con Karl Benz sería considerado como el primer coche de la historia a pesar de tener tres ruedas, pero antes de trabajar en él y durante algún tiempo después, Daimler y Benz realizaron otros trabajos y varios prototipos.
Uno de ellos lo desarrolló el genio de Schorndorf justo un año antes junto a otro grande de la historia del automóvil, Wilhelm Maybach.
En 1884, entre ambos habían diseñado “el reloj del abuelo”, como denominaron al pequeño motor de explosión que diseñaron por su parecido a un reloj de la época.
Con una cilindrada de 265 cc, entregaba 0,4 CV de potencia a 600 rpm, aunque era muy ligero.
Con él debían demostrar una de las teorías que les enfrentaban a muchos otros ingenieros y científicos de la época, en la que afirmaban que un motor de combustión de gasolina podría ser capaz de mover un pequeño carruaje.
El primer prototipo de Gotlieb DaimlerEl primer prototipo de Gotlieb DaimlerEntonces, corría el 27 de agosto de 1885, Daimler decidió construir un pequeño vehículo de pruebas para comprobar si el reloj del abuelo sería capaz de mover a un pequeño vehículo y un pasajero.
Ideo este pequeño marco de madera sujeto por dos pares de ruedas en el que el motor se sitúa en una zona preocupantemente peligrosa como podéis ver.
Recientemente, Mercedes construyó varias réplicas para celebrar esta onomástica como Dios manda.
Una de ellas es el pequeño cobertizo que utilizaron Daimler, Benz y Maybach, sobre todo el primero, para crear sus pequeños artefactos.
Otro fue esta primera “motocicleta” que carece evidentemente de transmisión por cadena.
Dispone de dos marchas que hay que engranar en parado.
La primera es para ir a velocidades de 6 km/h y la siguiente para hacerlo un poco más rápido.
El freno se activa tirando de una cuerda.
Al automóvil le quedaban 125 años de evolución, por lo menos….
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