Hace unos días ya os informábamos de que el productor de componentes automovilísticos austríaco-canadiense Magna había cerrado un preacuerdo con General Motors para comprar un 55% de su unidad europea Opel, a falta del visto bueno del consejo de administración estadounidense de GM.Ambas partes se habían dado unos días para estudiar la oferta y valorar las posibilidades.
Ahora, pasado este tiempo, la venta de la alemana Opel sigue estancada, pese a la reunión que mantuvieron el Gobierno germano y el negociador estadounidense de General Motors, John Smith. Y es que la empresa estadounidense estaría valorando la posibilidad de no vender su unidad Europea.
Al menos, no ha desmentido estos datos. El plan alternativo que GM estaría estudiando pasaría por obtener 3.000 millones de € de los Gobiernos estadounidense, inglés y español y evitar así la venta de Opel.Mientras tanto, la postura, tanto del Gobierno presidido por Angela Merkel como de sus socios de gobierno está intentando por todos los medios que el consorcio austriaco-canadiense Magna consiga hacerse con la marca Opel. Fuentes gubernamentales aseguran que los norteamericanos siguen interesados en “encontrar un inversor”.Lo único 100% segura hoy por hoy es que Magna cuenta con el respaldo del banco ruso Sberbank y la automotriz Gaz, también rusa, algo que presumiblemente no acaba de convencer a GM, que ve con buenos ojos su venta al inversor belga RHJ International, que podría sanear Opel y revendérselo a la empresa de Detroit en un futuro.No se prevén noticias próximamente, así que el siguiente paso en todo este serial se podría alargar hasta las elecciones generales en Alemania, que tendrán lugar el día 27 de septiembre. Allí veremos cuál es el siguiente movimiento, sino antes. Aquí, no lo duden, se lo comentaremos todo.Vía
