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Boris Johnson ha anunciado que las medidas incluidas en su ‘Plan B’ contra el coronavirus llegan a su fin. Esto implica acabar con las mascarillas obligatorias en lugares públicos y el pasaporte covid.
Estas medidas se implementan en Inglaterra, mientras que, en Escocia, Irlanda del Norte y País de Gales determinarán según sus parlamentos si mantienen las restricciones.
El Reino Unido ha registrado la mayor cifra de muertos por covid en el último año. Estas medidas de Boris Johnson se entiendes desde el escándalo Partygate, sobre fiestas privadas en Downing Street 10 mientras el país estaba en cuarentena.
Una posible cortina de humo para acallar los pedidos de renuncia.
Cuando las restricciones se sometieron a votación el pasado mes de diciembre ante la amenaza de ómicron, el primer ministro sufrió la mayor rebelión interna hasta entonces y su plan B ante la pandemia salió adelante tan solo por el apoyo de la oposición laborista.
A partir de esta medida, los alumnos en colegios no tendrán la obligación de llevar mascarillas en las clases -aunque sigue la recomendación de utilizarlas. El gobierno retirará su recomendación de teletrabajar cuando sea posible. También, en las residencias de mayores, se facilitarán las visitas «en los próximos días».
Las islas británicas volverían a su viejo plan de inmunidad de rebaño que incluso llevó a Johnson a casi perder la vida por culpa del virus. Ahora se dependerá de las dosis de refuerzo como salvavidas y que los ciudadanos sean responsables de su accionar con la pandemia en su momento pico con la variante ómicron. Quizá por eso el primer ministro buscó cubrirse declarando que la pandemia «no ha acabado».
Una de las restricciones clave que se mantiene es la de hacer cuarentena después de dar positivo por covid. Johnson puso como fecha el 24 de marzo para eliminar esta norma.
Johnson ha dicho que el gobierno planea seguir eliminando restricciones en el futuro y que, para conseguir que esto ocurra, la gente tiene que «seguir actuando de manera cauta» durante las próximas semanas de invierno, ya que seguirá habiendo «una presión significativa» sobre el sistema de salud.
"Rina Arano fue atada a un árbol sin ropa y lleva muerta casi dos semanas... Todavía estamos tratando de determinar la causa de la muerte".
Esta amable Policía tenía un gran corazón, se bajó del coche, se sentó junto a un indigente y desayuna con él en Estados Unidos.