Temas cubiertos
Pakistán pide ayuda internacional mientras siguen aumentando los muertos por las inundaciones. El sur del país combate la llegada de nuevas riadas por la crecida de los ríos.
En declaraciones a la BBC, el funcionario del Ministerio del Interior, Salman Sufi, ha dicho que el país está desesperado.
Necesitan obtener apoyo internacional. «Pakistán ha estado lidiando con problemas económicos, pero ahora, justo cuando estábamos a punto de superarlos, ha llegado el desastre del monzón», ha afirmado. En el noroeste del país miles de personas han huido de sus hogares.
«La casa que construimos con años de arduo trabajo comenzó a hundirse frente a nuestros ojos», ha dicho Junaid Hkan, de 23 años. «Nos sentamos al costado del camino y vimos cómo se hundía la casa de nuestros sueños».
La provincia de Sindh, en el sureste del país, también está gravemente afectada, con miles de personas desplazadas de sus casas. Las personas que vivían ahí lo describen como el peor desastre al que han sobrevivido. Las inundaciones son frecuentes en Pakistán, pero las lluvias de estos días han sido anormales. Eran más potentes y un funcionario local las ha descrito a la BBC como «inundaciones de proporciones bíblicas». En varias ciudades todas las casas están bajo el agua y únicamente se ven las copas de los árboles más altos. Las necesidades de las personas que han sobrevivido son variadas, van desde comida hasta dinero para poder adquirir lo más básico.
En ciertas zonas los niños han contraído enfermedades transmitidas por el agua. Una niña de 12 años, junto a su hermana pequeña, llevaban más de un día sin comer cuando apareció un camión con ayuda humanitaria. El primer ministro de Pakistán, Shehbaz Sharif, ha dicho que 33 millones de personas han sido afectadas por las inundaciones. Esto es un 15% de la población del país. Sharif ha afirmado que las pérdidas por las inundaciones son comparables a las del 2010 y 2011, las peores registradas hasta el momento.
Un perro salchicha, ataca brutalmente a su dueña en el rostro en la localidad de Swansea, en el sur de Gales, Reino Unido.
"Rina Arano fue atada a un árbol sin ropa y lleva muerta casi dos semanas... Todavía estamos tratando de determinar la causa de la muerte".