Durante los últimos años, muchos sellos discográficos han dedicado considerables recursos a la creación de empaques de CD más respetuosos con el medio ambiente.
Pero ya no es una prioridad.
Las ventas de álbumes han sido disminuido tanto que las productoras intentan recortar gastos en todo lo que pueden.
A finales del primer trimestre de 2009, las ventas de álbumes disminuyeron un 7 por ciento con respecto al año anterior, según se desprende de un estudio de Nielsen SoundScan.
Tres de las cuatro grandes casas discográficas dicen que los embalajes verdes no están en la lista de prioridades de la industria.
Sólo Sony, que había quedado a la zaga de los otros tres grandes, dice que continúan haciendo un esfuerzo por los envases sostenibles.
Las medidas de la marca japonesa incluyen el uso de cartón 100 reciclado para el material impreso de sus álbumes.
Las otras tres grandes están usando embalaje ecológico para algunos álbumes de sus catálogos, pero siguen trabajando en gran parte con materiales difíciles de reciclar, buscando dar un efecto más lujoso a las presentaciones de sus productos.
Sin embargo el camino verde parece encontrar un nuevo estímulo: los costes.
Según concluye un estudio de la Asociación Nacional de Grabación (NARM) y la Asociación de la Industria de Grabación de América, al reducir con materiales reciclabes el peso de los envases reduciría el coste del combustible en el transporte marítimo y también ayudaría a resolver el problema de espacio para almacenar la música a largo plazo.
Si se reduce el embalaje del CD en un 50 por ciento, se puede guardar un 50 por ciento más del producto en las tiendas.
Sin embargo, los ecopacks todavían enfrenta obstáculos.
Según advierten algunas fuentes de la industria de distribución la modificación del formato podría alterar todo el sistema de clasificación automatizada, generando unos costes de adaptación que la industria no puede asumir en estos momentos.
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