Hay pruebas que son realmente peligrosas para el público y otras que únicamente lo son si se dan circunstancias imprevisibles, pero también es muy fácil hablar a posteriori y por respeto a las ocho personas que fallecieron este domingo y las otras 12 que resultaron heridas durante la celebración del California 200, una carrera de enduro que tiene lugar en tierras del sur de ese estado, en el desierto del Mojave.
El accidente sucedió muy cerca de San Bernardino.
Era la noche del domingo y, como en tantas ocasiones, el público abarrotaba los márgenes de la pista sin asfaltar por la que los competidores circulaban a más de 100 km/h.
En el escalofriante vídeo que podéis ver más abajo, tomado desde una loma en la que los vehículo efectuaban un pequeño salto, puede apreciarse que apenas unos conos delimitaban la línea mas cercana posible a donde pasaban los coches y que la gente se había acercado unos metros más.
Además, los coches tenían una visibilidad muy baja a causa del polvo que levantaban los que iban delante.
En esas condiciones, las luces del vehículo a veces pueden llegar a deslumbrarte por la reflexión.
Pero no fue esa la causa del accidente, seguramente.
Por las imágenes se aprecia que uno de los participantes sale mal del pequeño salto que realiza su coche en la cuesta, el piloto trata de corregir la trayectoria al aterrizar, pero el coche le hace un extraño y se dirige hacia donde se sitúa el público.
El resto es el caos.
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