El Mobile World Congress cerró ayer sus puertas después de haber recibido más de 47.000 visitantes de 189 países diferentes. Durante el evento, los líderes del mundo de la telefonía como AT&T, Ericsson, Microsoft o Nokia, entre muchos otros, nos han ofrecido todas sus novedades en productos y servicios.
Quizás demasiadas para ser asumidas en tan poco tiempo. Aún así, los consumidores nos quedamos con lo que nos interesa, saber qué teléfonos no van a llegar en un futuro próximo. Un futuro que dentro del mercado de la telefonía parece centrarse en los smartphones, la telefonía inteligente.
La mayoría de compañías han demostrado estar plenamente concentradas en ofrecer terminales más completos y los esfuerzos se dirigen concretamente a lograr teléfonos que ofrezcan sistemas operativos más rápidos y eficaces para conectarse a Internet. En este sentido, se lleva la palma el Android de Google. Durante el Mobile World Congress lo hemos podido comprobar. Vodafone ha anunciado que ya tiene su Android, el HTC Magic, mientras Movistar ha corroborado que comercializará también un terminal con este sistema operativo, el HTC Dream. A parte, la gran compañía china de telefonía Huawei ha anunciado que desarrollará su propio teléfono con sistema operativo Android. Del mismo modo, Samsung ha asegurado que lanzará su terminal Android a finales de año y, aunque Dell todavía no se ha decidido entre Windows Mobile o Android, se lo está planteando seriamente. A juzgar por lo visto en el MWC, parece que lo vamos a tener difícil para escoger nuestro próximo smartphone.
