Por fin, a menos de una semana para el lanzamiento (que será el día 13), Bethesda se ha puesto las pilas para mostrarnos el lado más interesante de Brink, el FPS de Splash Damage supuestamente revolucionario que, según dicen, cambiará el panorama de los juegos de tiros para siempre.
Ahora lo que podemos ver es una comparativa entre el juego y la vida real… vista desde los ojos de Daniel Ilabaca, un famoso participante en torneos de parkour.Después de ver esto tengo que ratificarme en mi opinión inicial: El juego me parece una mezcla entre Call of Duty y Mirror’s Edge con una sencillez extra en el control que, según dicen, le da un toque especial.
Sin embargo, no se trata, obviamente, de algo tan estupendo como pensábamos en un principio que sería. Pese a todo, parece que será toda una experiencia jugable en multijugador y un posible gran éxito entre la comunidad gamer.Lo cierto es que, viendo el vídeo (rodado, por cierto, en la siempre preciosa Londres), se nota que han estudiado bien los movimientos y las físicas de la vida real, porque los saltos tienen la misma potencia y se ve de la misma manera que cuando salta el profesional. La idea de Splash Damage era conseguir que el jugador fluyera por el escenario cómodamente y eso sí que lo ha conseguido.Mientras este vídeo salía a la luz, Bethesda se ha dedicado a decir algunos de los datos de Brink para dejarnos de piedra. 45 formas de morir, 4500 efectos especiales de armas, una hora de música, 26000 líneas de diálogo (que se dice pronto), 8 packs de voces y, ojo, ¡la posibilidad de crear más de cien mil millones de personajes únicos! Por supuesto, se tienen en cuenta los cambios de bando y las pequeñas pigmentaciones de color, pero aún así esta burrada de personajes impresionan a cualquiera, sobre todo cuando no han hecho demasiado hincapié en su personalización y ha terminado siendo algo básico del juego. Solo falta esperar que no sea demasiado tarde para hacer este tipo de promoción, ya que los video-tutoriales se comieron muchas ganas de pegar tiros… y saltos.Leer más sobre BrinkVía
