Interesante aportación la de Seith Leitman, editor de TAB Green Guru Guides, en el blog thedailygreen titulada “Desmontando cuatro mitos sobre las motocicletas eléctricas”.
En el citado post Leitman se hace eco de las respuestas del Carl Vogel, autor del libro Build Your Own Electric Motorcycle (traducible por “Constrúyete tu propia moto eléctrica”), a algunos de los rumores y malentendidos acerca de esta forma de transporte ecológica.
En primer lugar, se comenta por ahí que las motocicletas eléctricas no corren lo suficiente.
Falso.
La mayoría de las motos eléctricas en el mercado alcanzan más de 90 km/h.
Como muestra un botón: la Electra Cruiser supera en carrera los 128 km/h, por no hablar de la increíble eROCKIT…En segundo lugar, también es falso, a pesar que muchos lo crean, que las motocicletas eléctricas tengan una autonomía insuficiente.
En Estados Unidos, por ejemplo, la distancia media cubierta por la mayoría de personas que deben tomar alguna forma de transporte cada día es de sólo 16 km.
También se ha calculado que el 98% de todos los viajes son de menos de 80 km.
Con la tecnología disponible en el mercado a día de hoy, gran parte de las motocicletas eléctricas actuales pueden recorrer hasta 125 km, así que sobrados vamos.
El mito más fácil de desarmar, a mi entender, es que las motocicletas eléctricas no convienen porque puedes quedarte tirado sin electricidad en cualquier lado, y entonces, ¿qué hacer? Obviando el hecho que también puedes quedarte sin gasolina en un carro o moticicleta normal, las eléctricas las puedes enchufar en todos lados.
¿Cuántas gasolineras, casas, negocios, etc.
carecen hoy en día de electricidad?Otro mito: que son caras.
Si bien es cierto que las que salen de fábrica siguen siéndolo (porque todavía no se ha masificado su producción, pero eso es sólo cuestión de tiempo), si uno se hace la conversión por su cuenta los costes son en realidad parejos a los de una motocicleta convencional.
Y luego, circular con ella, le sale mucho más barato a tu bolsillo y al planeta.
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