Un pez con tres ojos ha sido pescado en Córdoba, Argentina.
Puntualizo: con dos ojos y una malformación entre ambos que parece, pues eso, un ojo.
El horroroso animal fue atrapado en el lago Embalse, cerca del cual hay una central nuclear.
¿Habéis pensado inmediatamente en Los Simpson? Vosotros y medio ciberespacio.
El pez mutante de la insigne serie animada debe ser la imagen más vista hoy en Internet.
El pescado en Argentina es una tararira (Hoplias malabaricus), especie de agua dulce que puede alcanzar los cinco kilos de peso, carnívora y de ataque muy agresivo.
Habrá que ver si el encanto añadido del tercer ojo convierte a Embalse, conocido también como Chorro de Agua Caliente, en el nuevo sitio de moda entre los pescadores deportivos.
A los hombres que atraparon al pez la reacción de la academia les ha decepcionado.
Uno de ellos mantuvo a la criatura en su congelador, creyendo que algún científico querría examinarla.
Sin embargo, no hubo quien quisiera practicarle una necropsia o analizar su sangre.
Cansado de esperar, el señor tiró el cadáver a la basura.
El desinterés es, no obstante, comprensible, pues los científicos provocan mutaciones y malformaciones más sorprendentes -y desagradables- en sus laboratorios cada día.
¿Qué es un pez con tres ojos ante un cachorro de Beagle que emite un brillo verde fluorescente cuando es iluminado con luz ultravioleta? Recordaréis que este perro existe y fue creado, manipulación genética mediante, en el Hospital para Animales de la Universidad Nacional de Seúl.
Qué decir de los monos tití que brillan en la oscuridad, gracias a que los investigadores del Instituto Central de Animales de Experimentación, en Japón, modificaron sus genes, adjuntando el gen fluorescente de las medusas.
¿Temen los vecinos de Embalse que la malformación de la tararira sea consecuencia de la actividad de la planta nuclear? No es por ser pesimista, pero creo que los peligros de la radioactividad están más que vistos a estas alturas.
Tenga o no tres ojos el pez, sea o no consecuencia de la contaminación, nada ni nadie debería vivir cerca de una planta nuclear.
Hoy The Guardian informa que la planta de energía nuclear Fukushima Daiichi puede haber liberado a la atmósfera dos veces más radiación de la que había sido estimada anteriormente, según un informe publicado en línea por la revista Atmospheric Chemistry and Physics.
¿Peces con tres ojos? Y lo que no sabemos.
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