El atún rojo del Atlántico no encontrará protección en aguas de Estados Unidos.
La Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) ha decidido no conceder a esta especie el estatus de protegida en virtud de la Ley de Especies en Peligro de Extinción.
Ello pese a la preocupación que existe de que la pesquería en el Atlántico occidental pueda haber sido devastada por el derrame de petróleo en el Golfo de México, única zona de cría conocida de este pez.
Citada por el Washington Post, la NOAA ha dicho: Vamos a revisar la situación de la especie a principios de 2013, cuando tendremos una nueva evaluación de stock e información de los daños causados por los recursos naturales de evaluación del derrame de petróleo.
Sin embargo, no hace falta una evaluación adicional para saber que, en el ámbito mundial, la población de Thunnus thynnus corre un grave peligro.
Como señala The Washington Post, en los últimos 50 años, la población adulta del atún rojo del este del Atlántico y del Mediterráneo ha disminuido 74%.
En el Atlántico occidental, se ha producido una caída de 82% en 40 años.
Además, alrededor de 111 toneladas métricas de atún rojo muere de forma accidental en las redes de los barcos de pesca de pez espada y atún de aleta amarilla.
Hace poco, el Fondo Mundial para la Naturaleza y Greenpeace publicaron un comunicado conjunto en el que señalaban que barcos pesqueros libios no autorizados ya han zarpado para pescar atún rojo en el Mediterráneo, usando redes de cerco industriales.
De acuerdo con los grupos ecologistas, estos barcos están haciendo caso omiso a la solicitud de la Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico (CICAA) de evitar la pesca del atún en aguas libias debido a que los actuales disturbios políticos en el país harían imposible el control de las actividades pesqueras y el cumplimiento de las leyes.
WWF y Greenpeace creen que, además, socava fatalmente el plan de recuperación de la especie.
El año pasado, por estas fechas, Maria Damanaki, comisaria de pesca de la Unión Europea, decidió prohibir la pesca a gran escala de atún rojo en el Mediterráneo y en el océano Atlántico este durante esa temporada de pesca.
Sólo se prohibió la pesca a gran escala, así que los deseos de Francia, España, Italia, Grecia, Malta y Chipre de que la pesca artesanal quedase al margen de la prohibición fue tomada en cuenta.
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