La Asociación de Tropa y Marinería Española convoca manifestación por salarios justos.
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Contexto de la movilización
La Asociación de Tropa y Marinería Española (ATME) ha convocado una manifestación para el próximo 26 de abril en Madrid, en respuesta a las recientes declaraciones del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, sobre el aumento del gasto en defensa en Europa.
La ATME subraya que la defensa no solo se refiere a armamento, sino también a las condiciones laborales y retribuciones de quienes garantizan la seguridad del país. Esta movilización se considera crucial, ya que es la séptima en un contexto de agravios y abandono por parte de los gobiernos.
Demandas de los militares
Los militares españoles han expresado su deseo de que se les reconozca como una profesión de riesgo, similar a la Policía Nacional y la Guardia Civil. Exigen que se tomen en cuenta los peligros inherentes a su labor y reclaman salarios justos, así como una actualización de las dietas que han permanecido congeladas desde 2005. La ATME destaca que los servidores públicos en el ámbito militar son los peor pagados y piden una retribución acorde con la responsabilidad de su trabajo.
Compensaciones y transparencia
Entre las demandas más urgentes se encuentra la compensación económica por horas extras y la actualización de la Ley Orgánica de Derechos y Deberes. Los militares solicitan mayor transparencia por parte del Ministerio de Defensa, exigiendo una ley que les proteja y que evite el silencio administrativo. La movilización se produce en un contexto donde se ha anunciado una partida de 400 millones de euros, que se traduce en una retribución adicional de 200 euros por militar, cifra que la ATME considera insuficiente.
Un llamado a la acción
Con la creciente movilización en Europa en materia de defensa y el compromiso de España de aumentar su aportación a la OTAN, los militares ven este como un momento clave para actuar. La ATME hace un llamado a todos los miembros de las Fuerzas Armadas a participar en la manifestación, argumentando que no pueden dejar pasar otra oportunidad para reivindicar sus derechos laborales. La historia reciente muestra que han pasado 20 años sin una subida salarial significativa, lo que refuerza la urgencia de sus demandas.
