Ford anunció hace tiempo que sus planes contemplan la introducción de cinco modelos completamente eléctricos en EEUU y Europa para el año 2013. Quizá el más adelantado de todos ellos sea la Transit Connect Electric que va a aprovecharse de muchos servicios públicos y privados de reparto –como es el caso de FedEx- que van a pasarse en breve a la movilidad sin emisiones.
Pero además de utilizar las baterías de ión litio más desarrolladas y de mayor capacidad, todos los expertos creen que el éxito de los coches eléctricos depende de ayudar a sus conductores a gestionar el estado de su carga y, a mayor plazo, toda la energía que pueda acumular su vehículo.
Mientras no lleguen otras soluciones milagrosas, esto sólo se va a poder hacer por medio de las tecnologías disponibles. Así, en Ford han tenido la feliz idea de encargar a Microsoft un nuevo interfaz para estos usos. Denominado Hohm, este nuevo software no está únicamente dedicado al automóvil sino que más bien ayudará a las personas a manejar mejor la carga del mismo y también la de sus propio hogar. Esta integralidad es un aspecto importante pues todos los expertos auguran que el coche eléctrico habrá de influir también en la gestión energética de nuestras casas.Como os he contado en otras ocasiones, se trata de un mercado y un universo de aplicaciones totalmente nuevas. Seguramente por eso se han metido ya en este futuro negocio empresas tan fuertes como Magna International, Azure Dynamics o The Electric Power Research Institute. Su llegada será una revolución tan importante como la que se estableció con el PC. Las empresas que menciono arriba son las que están ahora decidiendo cómo será y qué nos ofrecerán. Si quieres leer más sobre tecnología, entra aquí.
El Congreso aprueba hoy la nueva ley de tráfico, por la que no se podrá sobrepasar los 20 km/h para adelantar, ni tener un detector de radares.
La DGT podría permitir a los jóvenes de 16 años conducir con un nuevo carnet. La propuesta ya funciona en países como Portugal, Italia y Francia.
Conducir con el abrigo puesto podría significar una multa porque algunas prendas quitan movilidad y libertad de movimientos, algo que sí recoge la DGT.