Trump niega su derrota y pedirá ayuda legal contra los votos "fraudulentos".
Donald Trump se niega a aceptar la derrota de las elecciones, mientras sus votantes salen a la calle armados para protestar por un presunto fraude electoral orquestado desde el partido republicano.
Trump niega la derrota
Donald Trump niega su derrota en las elecciones y provoca que votantes republicanos salgan a la calle armados.
La victoria del demócrata Joe Biden en las elecciones a Presidente de Estados Unidos está dejando imágenes de confrontación en varios estados del país.
Una confrontación alentada por el que ha sido el candidato republicano y actual Presidente del país, Donald Trump.
El republicano lleva varios días utilizando Twitter como medio para expresar su opinión, poco probada, de un fraude electoral.
Tras conocerse que Biden sería el nuevo presidente, Trump afirmó que «está falsamente proclamándose vencedor», con la ayuda de «sus alieados en los medios de comunicación».
El candidato republicano se niega a felicitar al que será el nuevo presidente de EEUU y sigue manteniendo que realizará más acciones legales contra el «recuento de votos ilegales». Medios norteamericanos, como CNN, informaban de Trump estaba frustrado por el poco impacto de su estrategia post-electoral.
Donald Trump se encontraba practicando golf en su club privado de Virginia, durante la proclamación de Biden como ganador. El republicano abría pedido ya «los mejores abogados» para emprender acciones legales en Pensilvania, Arizona, Georgia, Michigan y Wisconsin. Se va a pedir que en estos estados se suspendan el recuento de votos por correo por «falta de garantías legales».
Votantes protestan armados
En las últimas horas se han viralizado imágenes en las grandes ciudades de gente celebrando la victoria de Joe Biden. Sin embargo la «América profunda» ha salido a la calle masivamente para protestar por el resultado electoral.
2.000 seguidores en Arizona se reunieron para denunciar que el resultado era «culpa de los medios de comunicación falsos». En la manifestación, en las que se pudieron ver algunas armas, se escuchaban cánticos de «va a ser reelegido» y «lucharemos hasta el final».
