La economía de Rusia vivirá este miércoles 16 de marzo una de las jornadas más agónicas de su historia reciente: se enfrenta a la bancarrota.
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Las sanciones de la OTAN y la UE a Putin ha hecho que Rusia esté al borde de la bancarrota. Moscú vive este miércoles 16 de marzo su peor jornada económica desde el fin de la URSS.
Rusia, al borde de la bancarrota
La economía rusa vivirá este miércoles 16 de marzo una de las jornadas más agónicas de su historia reciente. Moscú deberá pagar sí o sí 117 millones de dólares (unos 106 millones de euros) en intereses. En total debe cumplir con dos bonos de deuda.
Sin embargo, lo cierto es que todo apunta a que no hará frente a su abono. Podrá intentar realizarlo en rublos, pese a que los inversores solo aceptarán dólares. Una respuesta que desataría un impago de deuda que podría alcanzar los 150.000 millones de dólares, es decir, unos 140.000 millones de euros. Esto, avisan los economistas, desatará un terremoto financiero que llegará hasta en las empresas europeas
La bancarrota de Rusia, explicada
Los analistas explican que desde hace semanas el impago es inevitable. Agencias de ‘rating’ como Fitch y Moody’s ya han rebajado la nota crediticia de Rusia por debajo del bono basura. Es por este motivo que seguramente no pagarán. De hecho, el propio FMI avisó la semana pasada de que la bancarrota es más que probable. Hablaron de que era «inminente». Así, la presidenta del Fondo, Kristalina Georgieva, explicó entonces que «no es que Rusia no tenga dinero, sino que no puede usarlo» por las sanciones aplicadas por Occidente tras la invasión de Ucrania.
La situación de Moscú
Han empleado una justificación similar en Moscú, quien ha acusado a la Unión Europea y Estados Unidos de empujarle a esta situación. Por su parte, desde el Ministerio de Finanzas del país han asegurado que se van a dar las órdenes para realizar los pagos comprometidos. Sin embargo, también reconocen que estos dependen de la congelación de las cuentas en moneda extranjera del Banco de Rusia y el Gobierno. Mientras tanto, occidente ha congelado todos los activos en el extranjero del banco central ruso. Esto complica el pago de intereses de bonos como los que vencen hoy, que no se pueden pagar en rublos, sino que están comprometidos en dólares.
