El primer rey de Portugal, Alfonso I, nació en el año 1109, hijo de Enrique de Borgoña y Teresa de León. Su lugar de nacimiento fue el majestuoso Castillo de Guimarães, ubicado al noroeste de Oporto. En la actualidad, este lugar, en la ciudad de Guimarães, es conocido como la cuna de Portugal y es uno de los destinos más hermosos del país.
Hoy, la ciudad es renombrada por su centro histórico dentro de las murallas, que es Patrimonio Mundial de la Unesco debido a las estructuras y monumentos excelentemente preservados.
Un paseo por Guimarães traslada a los visitantes a la Edad Media.
Las características principales de la ciudad son las casas nobles, los arcos que se ciernen sobre las calles estrechas y las construcciones con barandillas de hierro y balcones y portales de granito.
El recorrido puede empezar en la parte baja de la ciudad, en el Largo da Oliveira. Aquí se encuentra el Padrón de Salado, un templo gótico construido durante el reinado de Afonso IV. En la misma plaza se encuentran la iglesia y la colegiata de Nuestra Señora de Oliveira, donde se halla el Museo Alberto Sampaio en su impresionante claustro. Este alberga una colección de obras de orfebrería medieval y renacentista, destacándose un retablo de plata del siglo XIV, único en Portugal, según informes de la oficina de turismo del país.
Partiendo de este punto, avanzaremos hacia el Palacio del Concejo, y seguiremos hacia la Plaza de Santiago, un antiguo punto de encuentro para los peregrinos que se dirigían a Compostela en la Edad Media, según relatan los historiadores. Luego, la Calle de Santa Maria nos guiará a la zona superior de la ciudad, donde se encuentran ubicados el Convento de Santa Clara y la Casa del Arc. Otra opción es ascender por la Avenida Alberto Sampaio, que corre paralelo a los vestigios de la antigua muralla.
Zona alta de la ciudad: desde el castillo hasta el palacio
Una vez en la zona superior de la ciudad, nos toparemos con el imponente Castillo de Guimarães, con sus sólidos paños de piedra y la torre de homenaje que domina el conjunto defensivo. Gracias a un conjunto de remodelaciones realizadas en la primera mitad del siglo XX, la fortaleza retomó su apariencia majestuosa.
El Palacio de los Duques de Bragança, construido en el siglo XV y que refleja el influjo de la arquitectura nobiliaria francesa, se encuentra próximo al castillo. Asimismo, en esta zona se hallan el Monumento a Don Alfonso Henríquez y la capilla románica de San Miguel, levantada en el siglo XIII y lugar en el que fue bautizado Alfonso I de Portugal.
Para concluir nuestro recorrido por Guimarães, nos desplazaremos al Largo do Toural y su espléndida fuente del siglo XVI. Continuaremos por la Calle D. João I, flanqueada por viviendas con barandillas de madera del siglo XVII. Finalmente, podemos conocer la iglesia del Convento de Santo Domingo, el Museo Arqueológico Martins Sarmento, la iglesia de Nuestra Señora de la Consolación y el antiguo mercado municipal que, hoy en día, alberga la Plataforma de las Artes y el Centro de Artes Internacional José de Guimarães.
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