Donald Trump recuerda la llegada de Pele a Nueva York y su influencia en el fútbol estadounidense, revelando cómo cambió la percepción del deporte en el país.

La llegada de Pele a Estados Unidos en la década de 1970 no solo fue un momento histórico, sino que representó un verdadero punto de inflexión para el fútbol en el país. Recientemente, el expresidente Donald Trump compartió su admiración por este legendario jugador brasileño, subrayando no solo su talento, sino el impacto que tuvo en la popularidad del deporte en una época en que el fútbol aún buscaba su lugar en el corazón de los estadounidenses.
Esto nos lleva a reflexionar: ¿realmente hemos entendido la importancia de los íconos deportivos en la evolución de la cultura futbolística en EE. UU.?
Un vistazo a los números del fútbol en EE. UU.
Desde la llegada de Pele, el fútbol ha tenido un crecimiento sostenido, aunque ha enfrentado varios desafíos. Hoy en día, la Major League Soccer (MLS) ha visto un aumento notable en su audiencia y en el número de asistentes. Por ejemplo, en 2020, la MLS reportó un crecimiento del 14% en su asistencia promedio por partido, a pesar de las dificultades que trajo la pandemia. Estos datos cuentan una historia de crecimiento que no se puede pasar por alto. Sin embargo, la realidad es que el fútbol sigue luchando por alcanzar la popularidad de deportes como el baloncesto o el fútbol americano. ¿Qué se necesita para cambiar esto?
El reconocimiento de figuras como Pele y su influencia en la percepción del fútbol en EE. UU. se reflejan en el creciente interés por el deporte entre las nuevas generaciones. La MLS ha buscado posicionarse como una liga competitiva a nivel internacional, y aunque esos esfuerzos están dando frutos, la pregunta sigue en el aire: ¿cuánto más se necesita para lograr un verdadero product-market fit en el contexto deportivo estadounidense?
Lecciones de la historia: de la llegada de Pele a nuestros días
La llegada de Pele a los New York Cosmos en 1975 no solo fue una jugada estratégica para revitalizar la North American Soccer League (NASL), sino que también buscaba atraer la atención mediática hacia el fútbol en un momento de escaso interés. Al recordar su experiencia como espectador, Trump destaca cómo la presencia de un ícono puede cambiar la narrativa en torno a un deporte. Sin embargo, hemos visto muchas ligas deportivas fallar por no poder sostener ese interés a largo plazo. ¿Qué lecciones podemos extraer de esto?
La historia de Pele se entrelaza con el crecimiento del fútbol en EE. UU., pero también resalta la importancia de la sostenibilidad. Muchos íconos aparecen y desaparecen, pero el verdadero desafío radica en convertir ese interés inicial en un compromiso duradero. El churn rate en el deporte es un indicador crítico que se debe monitorear, y es esencial que las ligas y clubes trabajen en estrategias que fomenten la lealtad entre sus aficionados. ¿Cómo podemos asegurar que este compromiso se mantenga?
Takeaways para el futuro del fútbol en EE. UU.
Los fundadores y directores de producto en el ámbito deportivo deben aprender de la experiencia de figuras como Pele y de la historia del fútbol en Estados Unidos. Aquí hay algunos puntos clave a considerar:
- Construcción de una base sólida: No basta con atraer a estrellas; es crucial desarrollar una infraestructura que fomente el crecimiento a largo plazo.
- Conexión con la comunidad: Invertir en programas que involucren a los jóvenes en el deporte puede ser una estrategia efectiva para cultivar una base de aficionados comprometidos.
- Análisis y adaptación: Monitorear los datos de crecimiento y la satisfacción del cliente es esencial para ajustar la estrategia y asegurar el product-market fit.
En conclusión, la llegada de Pele a Nueva York fue la chispa que encendió el interés por el fútbol en EE. UU. Pero para que este fuego perdure, es necesario un enfoque estratégico y sostenible que asegure que el interés por el deporte se mantenga a lo largo del tiempo. ¿Estamos listos para llevar el fútbol estadounidense al siguiente nivel?