Eric M. Smith, el 'asesino pelirrojo', que mató y abusó de un niño de cuatro años cuando él tenía 13, está en libertad después de pasar décadas en la cárcel.
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Eric M. Smith, el ‘asesino pelirrojo’, que mató y abusó de un niño de cuatro años cuando él tenía 13, está en libertad después de pasar décadas en la cárcel.
Desde 1994 en la cárcel
Eric M. Smith, que entonces tenía 13 años, llevó a su víctima a un bosque y la golpeó en la cabeza con una piedra.
Un año después Smith fue juzgado a los 14 como un adulto según las leyes de Nueva York. Fue declarado culpable por el asesinato en segundo grado de Derrick Robie, de cuatro años, y encarcelado de nueve años a cadena perpetua.
Niegan la libertad a Smith
Podía optar a libertad condicional por primera vez en 2002, pero los padres de Derrick se opusieron a los 11 ocasiones en que el victimario y su representante lo intentaron.
Según afirmó el Departamento de Correcciones y Supervisión Comunitaria, el pasado 5 de octubre Smith sí tuvo éxito y será liberado el próximo 17 de noviembre.
La defensa de Eric Smith
El abogado defensor argumentó que su representado no era responsable de sus actos y que sufría un trastorno mental, el cual le llevó a asesinar en un arranque de rabia patológica y sin provocación. Acusó que tuvo «síndrome explosivo intermitente» debido a años de acoso escolar e ira reprimida.
El éxito de su salida es debido a las declaraciones de la familia de la víctima, las juntas de libertad condicional que analizan los antecedentes penales de un preso, su comportamiento en prisión, el riesgo que representa para la seguridad pública y las posibilidades de que pueda reintegrarse con éxito a la sociedad. Todas estas condiciones han hecho que «el asesino pelirrojo» quede en libertad en menos de un mes.
Eric Smith sufrió bullying
«Empecé a creer que yo no era nada ni nadie. Sentí que cuando iba a la escuela iba al infierno, porque eso es lo que era para mí» ha mantenido siempre Erick Smith, sin embargo cuando en el juicio se le preguntó por si disfrutó durante el asesinato, siempre ha contestado con la misma respuesta: «En ese momento, sí».
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