Interesante campaña publicitaria de presión de la iglesia estadounidense (en extraña alianza con asociaciones de veteranos de guerra) a favor de las políticas ambientales de Barack Obama.
Financiados por la American Values Network (AVN), los anuncios apoyan la legislación ambiental que el Presidente espera que el Congreso apruebe y piden que “se priorice a los más vulnerables aquí y en el extranjero”.
La campaña, cuyas caras visibles son los pastores Burns Strider y Joel Hunter, persigue un ley sobre el clima que incluya ayudas directas para compensar el aumento de los costos de la energía para los pobres de Estados Unidos y apoyo internacional para que los países en vías de desarrollo puedan adaptarse a los efectos del cambio climático.
Los anuncios han empezado ya a verse y escucharse en estados tradicionalmente muy religiosos, como Georgia, Florida, North Carolina, Mississippi, Alabama, Louisiana, Virginia, y Ohio.
En uno de ellos, el pastor protestante Joel Hunter, que es republicano, por cierto, dice:A medida de que el nivel del mar aumenta, los cultivos se marchitan y los ríos se secan, la creación de Dios clama por socorro.
El fracaso para responder al mandato de ser buenos administradores tiene consecuencias.
El efecto desestabilizador del cambio climático afectará sobre todo a los pobres, y también pone en peligro nuestra seguridad nacional, nuestra prosperidad económica, y el futuro de nuestros hijos.
Sin embargo, no importa cuán sombrías parezcan las cosas, la redención es siempre posible.
(Traducción libre)Por su parte, Tom Perriello, ahondó en una conferencia con periodistas:Hacer frente al cambio climático no es sólo un asunto de seguridad nacional y de buena política económica, sino un deber moral de cuidar de la creación de Dios y de atender a las necesidades de los que, a pesar de ser los que menos contribuyen al cambio climático, se llevan la peor parte de su carga.
Tenemos que garantizar que esta legislación se ocupe en aliviar la carga de las familias con ingresos bajos y medianos, especialmente en un momento en que millones de norteamericanos están sin trabajo.
(Traducción libre)La American Values Network, que es quien pone el dinero, se vanaglorió de que sus mensajes evangélicos sobre el clima llegarían vía correo electrónico a nada más y nada menos que a 5,3 millones personas.
Este grupo de presión o coalición está compuesta por una serie de grupos religiosos que coinciden en la misma posición acerca de que cualquier legislación ambiental debe centrarse en ayudar a los más vulnerables.
Forman parte la Evangelical Climate Initiative, Southern Baptist Environmental Climate Initiative, la National Hispanic Christian Leadership Conference, la United Methodist Church General Board of Church and Society, la Iglesia Evangélica Luterana en América, la Iglesia Presbiteriana estadounidense, la Iglesia Episcopal, y Redeem the Vote.
Increíblemente, a la coalición también pertenecen tres grupos ligados al mundo militar: la Veterans Alliance for Security and Democracy, el Truman National Security Project, y el Veterans Green Jobs.
Al otro lado del charco, el Vaticano planea construir la planta de energía solar más grande del mundo y ha descubierto que la píldora anticonceptiva es contaminante.
Y en Ecologiablog nos preguntamos acerca del tema superpoblación y religiones.
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