En los últimos años, el cansancio mental se ha convertido en un caso frecuentemente consultado por las personas en su visita con el doctor.
En estos tiempos en donde debemos trabajar y estudiar desde casa con preocupaciones relacionadas a nuestra nueva situación mundial a causa del coronavirus, el cansancio mental y sus señales de alerta no se han hecho esperar y las personas están colapsando mentalmente por excesos en las nuevas rutinas, las cuales han cambiado radicalmente y nos han hecho adaptar a la nueva realidad.
El cansancio mental: las señales
Normalmente los seres humanos sufrimos varios cambios y nuestro cerebro no está acostumbrado a muchos de ellos, este sobresfuerzo por cumplir con todas las obligaciones que tenemos diariamente puede generar cansancio mental y este malestar puede llegar a afectar las funciones naturales de nuestro cuerpo.
Debemos intentar tomar las situaciones actuales con calma y entender que nuestro cerebro está adaptado para entender desde la repetición, esto sucede porque nuestras neuronas crean una red neuronal con información constante y precisa demostrando que entre más realizamos una actividad, mejor se asimila para nuestro sistema. Si logramos hacer avances repetitivos con nuestro cuerpo, tendremos la ventaja de hacer a futuro las cosas de manera automática.
Debemos aprender que los procesos van desde nuestra infancia, un ejemplo de esto es el aprendizaje en los bebés, pues ellos tienen un proceso lento en cuanto al aprendizaje y las funciones, mientras su cerebro se adapta al nuevo mundo ellos comenzarán a llorar, balbucear, sonreír, gatear, caerse y caminar, cuando logran hacer estás funciones muchas veces, su cerebro empieza a crear costumbres.
Las decisiones y las actividades en los seres humanos llevan consigo cambios y estos cambios muchas veces no son tan fácilmente aceptados por el cerebro, ya que nuestro sistema cerebral es reacio ante los cambios y de manera automática los rechaza, pues trabaja como un reloj.
¿Por qué sucede el cansancio mental?
El cerebro es una maquina maravillosa capaz de realizar muchas de funciones al mismo tiempo, sin embargo cuando tenemos infinidad de información nueva nuestro cerebro empieza a desgastarse y aquí es donde se visualizan los síntomas del cansancio mental.
Nuestras nuevas formas de vivir, adaptarnos a los cambios, viajar, trabajar, estudiar, limpiar, lavar, cocinar, las emociones que nos dominan, estar pendiente de los demás, preocuparnos por lo que sucede en nuestro mundo y responder ante la sociedad con nuestras labores, son procesos que muchas veces el cerebro no tiene guardados en su «disco duro» y en sus redes neuronales, que se esfuerzan por crear muchas conexiones al mismo tiempo para procesar todo, esto puede generar un colapso en nosotros porque la mente toma esto como actividades a «destiempo».
El cansancio mental y sus señales de alerta las cuales son:
- Falta de sueño en la noche y agotamiento en el día.
- Poca energía corporal, pesadez, cansancio excesivo en las funciones y por esto no logras ser ágil.
- Perdida de la concentración y ansiedad por querer hacer varias actividades al tiempo.
- Ansiedad e irritabilidad.
- Estado de ánimo con altibajos frecuentes, esto puede generar depresión y desaliento.
- Días largos, extenuantes y poco productivos pues los procesos del cerebro se relentizan y solo quieres decansar y estar en total tranquilidad, lamentablemente esto no ocurre porque la mente sigue trabajando de manera rápida.
Estos cambios y señales son una alerta máxima para que cambies tus hábitos y te tranquilices un poco, la falta de sueño, no comer bien, no tener actividad física y concentrarse solo en las labores cotidianas, puede generar cambios físicos y mentales negativos en nuestro cuerpo, esto a largo plazo afectará nuestra salud quitándole energía a nuestra mente y cuerpo. Un agotamiento que lentamente llegará a nuestro sistema nervioso central perdiendo defensas y deprimiendo nuestro sistema inmune.
Hay que seguir las recomendaciones de los expertos y realizar actividades como: dormir de 7 a 8 horas, para que nuestro cuerpo tenga buenos cambios durante su ciclo de sueño, salir a caminar, hacer ejercicio constante, bailar, cantar, correr, harán que nuestro cuerpo y mente creen defensas y quemen esas toxinas negativas que no nos permiten aprovechar mejor el tiempo y nos desestabilizan. Es importante querernos y saber cuando es tiempo de ayudarnos a nosotros mismos. ¡Debemos parar para continuar!
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