El remake de V ha ofrecido un episodio algo raro esta semana.
Y es que ha habido más novedades que en el anterior capítulo, titulado John May, pero quizás menos trascendentes por lo que el resultado ha sido un poco más aburrido.
Parece que a la serie le cuesta entrar de verdad en la lucha entre los humanos y los visitantes.
Y eso que esta semana parecía la indicada para ello.
Y el principio del capítulo así lo confirmaba cuando Erica se encontraba con tres cadáveres de miembros de la Quinta Columna así como un cuarto hombre que había huido.
Y, como no podía ser de otra forma, decide avisar a sus amigos antes que a sus compañeros del FBI.
La prioridad es entonces encontrar al superviviente del ataque de los visitantes llamado Alex Caruso.
Y, después de pasar a ver a su padre, lo consiguen.
¿Pero qué hacer con él? Pues Hobbes tiene la buena idea de utilizarlo como cebo.
Para eso, lanza un mensaje de SOS en la web que la resistencia utiliza para comunicarse.
La idea es que algún visitante vendrá a matarlo pero, antes de que lo haga, los demás se lo impedirán.
Y el plan sale más o menos bien.
Más o menos porque acaban matando a Caruso pero Erica y los demás consiguen atrapar al asesino.
Pero la sorpresa llega cuando descubren que…¡es un humano! Cuando se despierta le preguntan porque lo ha hecho y su respuesta es simplemente “porque no podemos ganar” (de ahí el título del episodio).
Lo cierto es que esta trama parece más un amago de guerra entre la resistencia y los visitantes que una guerra de verdad.
Algo parecido al problema de Ryan que se pasa el capítulo buscando a su amada después de que se enterase de que le escondía algo.
Al final, la encuentra en una clínica de visitantes y la rescata antes de que alguien se dé cuenta.
Pero poco más.
Suponemos que sabremos más del tema en el próximo capítulo.
Más entretenidas han resultado las dos otras tramas.
La primera es el movimiento diplomático de Anna que presenta la “energía azul” (una nueva energía que han traído los visitantes) en una conferencia mundial de jefes de Estado.
Un movimiento estratégico que le permite ser vista como una salvadora y que seguro que será muy beneficioso para ella.
Y la buena sorpresa de la semana ha sido la historia de Tyler y Lisa que, hasta el momento, había sido lo más soso de la serie.
Siguiendo con las órdenes de Anna, Joshua sigue haciendo pruebas a los V de la nave para asegurarse de que no tienen sentimientos.
Pero Lisa no supera la prueba.
Y es que la compañía de Tyler parece que la está cambiando.
Y más cuando se van solos en una nave espacial y allí dan rienda suelta a su fogosidad.
Pero, en una decisión arriesgada, Joshua decide mentirle a Anna y decirle que Lisa ha superado la prueba.
Algo que Lisa no comprende.
Tendremos que ver cómo reacciona en el futuro, de qué lado se posiciona cuando llegue el momento de elegir y ver si Joshua tenía razón o no.
Asuntos que podremos seguir viendo el martes que viene en una nueva entrega de la serie.
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