No es nada fácil ser Amy Winehouse, porque cuando eres Amy Winehouse hay pocas cosas en este mundo que aún no has probado, y puede que te resulte difícil encontrar motivaciones al día a día.
Eso es exactamente lo que ha debido de pasarle a nuestra cantante favorita, que ya anda buscando adicciones alternativas a las habituales.
Es por eso que ahora le ha dado por fumarse las mondas de los plátanos (que son los filamentos que tienen bajo la cáscara.
Sí, esos hilitos molestos que siempre quitamos.
Ahora resulta que se fuman).
Todo ocurrió cuando ella estaba descansando de nuevo en Santa Lucía, en la ciudad del Caribe donde hizo su rehabilitación, y a la que decidió volver el pasado 3 de abril para pasar otra temporadita de reposo.
Pues tanto reposo terminó por aburrirle, y como esta vez no tenía cerca ningún jovencito con el que revolcarse para matar el tiempo y vio que la costumbre de los lugareños era fumarse las mondas de los plátanos, pues se decidió a probar.
Los efectos fueron devastadores.
Como ella sólo está acostumbrada a fumar crack y esas cosillas, pues de repente un poco de fruta no le sentó bien del todo.
Dicen los turistas que tuvieron la mala fortuna de estar presentes en el altercado que la cantante, que estaba tumbada tranquilamente con sus amigos en la playa, de repente y tras fumar un poco de plátano, echó a correr semidesnuda por toda la playa agitando los brazos sin parar y gritando cosas sobre ella misma.
Estas cosas sólo le pasan a Amy Winehouse, que es capaz de drogarse con un plátano, y puede que algún día oigamos que se emborrachó con un vaso de horchata.
Para que luego digan lo sana que es la fruta.
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