Faltan muy pocas series para dar por finiquitado el comienzo de la temporada 2011/2012 en las cadenas de television, y Hell on Wheels es quizás, uno de los últimos estrenos que nos llegan desde Estados Unidos.
La cadena AMC ha preparado este western algo atípico, que tiene como protagonista a Anson Mount y que nos sitúa en los Estados Unidos posteriores a la Guerra Civil.
En esa época, en la que la nación comenzaba a asentarse como una de las grandes de occidente, la construcción del ferrocarril que iba a unir Este y Oeste fue el hecho más remarcable de lo que iba a venir en décadas posteriores.
Y en medio de esa epopeya, que tiene mucho de épica y de intensa, se sitúa la acción de la trama.
Mount interpreta a un ex-soldado confederado, Cullen Bohannan, que, aparentemente, está huyendo del Este y se dirige hacia el Oeste.
Para pasar desapercibido, se alista en la empresa de ferrocarriles que está construyendo la línea que atraviesa el país.
Allí, se pone bajo las órdenes del capataz de la expedición, de quien finalmente descubrimos que tiene un pasado oscuro vinculado a Mohannan.
La vida del soldado confederado pasará a formar parte de la dura tarea de instalar el ferrocarril en zonas por donde no se había pasado antes, y tendrá que convertirse en el capataz de una cuadrilla de trabajadores negros.
Aunque el fin de la guerra provocó la abolición de la esclavitud, los antiguos esclavos continúan sufriendo los rigores de la brutalidad de los blancos, y eso es algo que se ve claramente en las obras.
Mohannan ha sido, y lo confiesa al principio del episodio, un esclavista convencido, pero liberó a sus esclavos un año antes de la declaración de la guerra.
No ha sido duro con ellos y tampoco lo pretende ser con sus obreros.
Pero algo hace que las cosas se tuerzan y uno de ellos muere bajo los cascos del caballo de su jefe.
La situación se complica cuando Mohannan está dispuesto a cobrarse la venganza por la situación que le ha llevado hasta allí, y va todavía a peor, cuando el capataz general cae degollado ante sus ojos, antes de que pueda darla la información que necesita para llevar a cabo esa misión.
En general, la serie se aparta del tono habitúal de las series del Oeste que hemos visto hasta el momento.
Es una historia de venganza clásica, pero en un escenario muy diferente, que aunque discurre por las praderas americanas, se nota opresivo y asfixiante.
¿Qué es lo que persigue este pistolero sureño, y por qué ha llegado hasta ahí? El final del piloto lo deja bien claro, pero no te lo voy a contar yo aquí.
Entre los acompañantes del protagonista nos encontraremos a Common, el rapero, el veterano Colm Meaney, Dominic McElligot, James D.
Hopking y Ben Esler, entre otros.
Todavía es pronto saber si nos encontramos ante una serie de las que crean afición de las de culto, o si es algo que se desinflará por agotamiento en las próximas semanas.
Por ahora, parece que será lo primero, así que tendremos que esperar un tiempo para averiguarlo.
