¿Hasta qué punto están dispuestos los estudios de Hollywood y los espectadores a perdonar a sus estrellas errantes? Han sido necesarios años y años para que Tom Cruise, Christian Bale o Mickey Rourke fuesen perdonados por la opinión pública pese a haber cometido pecados mucho menores que el de Mel Gibson, que se enfrenta a uno de los peores momentos de su vida después de que fuese grabado amenazando e insultando a su ahora ex esposa.
Las espectaculares polémicas montadas en torno al controvertido actor y director no sólo le apartaron de aparecer en un cameo de la esperada secuela de Resacón en Las Vegas, si no que han estado a punto de cancelar el estreno en cines de The Beaver.
Salvo cambio de parecer en las próximas semanas, la comedia dramática llegará a las salas la próxima primavera.
Diecisiete años después de coincidir y hacerse amigos en el plató de la comedia en clave de western Maverick, Jodie Foster dirige y acompaña a Mel Gibson en su tercera película como realizadora, la primera en dieceséis años.
Los jóvenes y prometedores Anton Yelchin (Star Trek) y Jennifer Lawrence (Winter’s Bone) completan el reparto de una película basada en un guión presente hace años en la lista de mejores guiones no producidos de la industria, obra de Kyle Killen.
La original premisa de la película sigue a un hombre de mediana edad que va a todas partes con una marioneta en su mano que tiene forma de castor y a la que trata como si fuera un ser humano de verdad, en una especie de cruce entre las aclamadas comedias independientes Cómo ser John Malkovich y Lars y una chica de verdad.
El curioso trailer logra confirmar a The Beaver como una de las películas a seguir en los próximos meses, con una gran oportunidad para que Gibson demuestre que es mucho más que un polemista con tendencia a equivocarse.
Muchas veces.
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