El acuerdo histórico del Brexit, alcanzado entre la UE y el Reino Unido, deja algunos puntos clave para las relaciones futuras.
El acuerdo histórico alcanzado para el Brexit, entre la Unión Europea y Reino Unido, deja varios puntos clave. Un pacto que ha llegado in extremis, cuando todo el mundo comenzaba a aceptar un Brexit duro el próximo 31 de diciembre.
Acuerdo histórico para el Brexit
El acuerdo histórico alcanzado para el Brexit ha dejado algunos puntos clave. Las negociaciones entre la Unión Europea y Reino Unido alcanzaron el entendimiento en los últimos momentos.
Tras sobrepasar varias fechas límites sin llegar a un acuerdo, todo el mundo creía que el próximo 31 de diciembre se viviría una salida del Reino Unido dura, sin llegar a acuerdos totales.
Finalmente, el pasado jueves 24 de diciembre se alcanzó un pacto para un Brexit equitativo para ambas partes.
El acuerdo sobre la futura relación Unión Europea-Reino Unido entrará en vigor el próximo 1 de enero de 2021. Las negociaciones de última hora han provocado que el pacto sea menos ambicioso de lo que la UE esperaba. El acuerdo final para el Brexit ha establecido, entre otras cosas, una relación comercial sin cuotas ni tarifas, con Londres asumiendo las reglas igualitarias de competencia.
Puntos clave del pacto
El acuerdo alcanzado el 24 de diciembre consiguió que ambas partes llegaran a buen puerto en algunos ámbitos que parecían bloqueados. Así, el Brexit trae consigo algunos puntos clave sobre cómo serán las relaciones entre Europa y Reino Unido en el futuro.
Sobre el comercio, la Unión Europea ha emitido un documento explicativo en el que explican que no se establecerán aranceles y cuotas entre ambas partes para todas las mercancías. Este acuerdo comercial es de gran importancia para productos agrícolas y pesqueros. Los bienes tendrán que cumplir «las reglas de origen». También, se simplifican los procedimientos aduaneros.
Acuerdos sobre los viajes. Anualmente, UE y Reino Unido transportan, entre sí, unos 210 millones de pasajeros. El acuerdo asegurará la continuidad de la conectividad aérea, vial y marítima. Las aerolíneas británicas dejarán de opera vuelos intraeuropeos, pero mantendrán rutas básicas. En cuanto a los viajero, será Reino Unido quien determine la obligación de obtener un visado, para estancias cortas.
El tema más enquistado era la pesca. Finalmente, se ha acordado un período de transición, hasta 2026, en el que la UE «transferirá un 25% del valor de las capturas», y después, se establecerán negociaciones anuales.
En cuanto a las subvenciones, ambos socios tendrán normas independientes, pero si una de las partes consideran que existen normas perjudiciales, se podrá impugnar a través de un mecanismo de arbitraje independiente.
Otro punto clave es Irlanda del Norte. El país seguirá siendo miembro de la UE y se mantendrá con las normas europeas. Además, se eliminan la necesidad de excesivos controles en la frontera irlandesa. Reino Unido, por su parte, dejará el programa Erasmus.
El pacto alcanzado para el Brexit llega a una semana de que Reino Unido abandone definitivamente la Unión Europea. Sin embargo, el acuerdo alcanzado deberá ser examinado por los Estados miembro y ser aprobado en un pleno extraordinario del Parlamento Europeo para entrar en vigor.
