Olha, una mujer de 31 años, reveló a Human Rights Watch que fue violada por los rusos el pasado 13 de marzo debido a la guerra en Ucrania.
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El estremecedor testimonio de una mujer violada por soldados rusos en Járkov: “Todo el tiempo me apuntaba con un arma”.
El estremecedor testimonio de una mujer violada por soldados rusos
Human Rights Watch denunció este domingo 3 de abril que en las zonas de Ucrania bajo control ruso se cometieron “ejecuciones sumarias” y “otros graves abusos”.
Estos podrían constituir crímenes de guerra. El 13 de marzo, un soldado ruso golpeó y violó repetidamente a Olha. Es una una mujer de 31 años de Malaya Rohan, un pueblo en la región de Járkov que las fuerzas rusas controlaban en ese momento.
Unos 40 aldeanos, en su mayoría mujeres y niñas, estaban escondidos en el sótano de una escuela local. Estaba allí con su hija de 5 años, su madre, su hermana de 13 años y su hermano de 24 años.
Alrededor de la medianoche del 13 de marzo, un soldado ruso ingresó a la fuerza a la escuela. “Rompió las ventanas de vidrio en la entrada de la escuela y golpeó la puerta”. Un guardia abrió.
La mujer cuenta cómo fue violada por soldados rusos en Járkov
El soldado llevaba un rifle de asalto y una pistola. En el sótano ordenó que le diera a la niña, pero ella lo rechazó. El soldado ordenó a su hermano que lo siguiera para ayudar a encontrar comida. Los dos abandonaron el sótano y regresaron una o dos horas después. El soldado regresó y le dijo que lo siguiera.
La violación
El soldado la llevó a un salón en el segundo piso, le apuntó con un arma y le dijo que se desnudara. Ella contó. “Me dijo que le practicara sexo oral. Todo el tiempo sostuvo el arma cerca de mi sien o me la puso en la cara. Disparó dos veces al techo y dijo que era para darme más ‘motivación’”. La violó y luego le dijo que esperara en una silla. “Mientras me vestía, el soldado me dijo que era ruso y que tenía 20 años. Dijo que le recordaba a una chica con la que iba a la escuela”.
El soldado tomó un cuchillo y le dijo que lo hiciera como él dijo si quería volver a ver a su pequeña. Luego la violó nuevamente, le puso un cuchillo en la garganta y le cortó la piel del cuello. También le cortó la mejilla con el cuchillo y parte del cabello. La golpeó en la cara con un libro y la abofeteó repetidamente. La mujer, finalmente, pudo salvar la vida y denunciar el hecho.
