El Gobierno de coalición, para sacar adelante los Presupuestos, cede a negociar el uso del Castellano como lengua vehicular.
En España, el Gobierno cede a negociar el uso del Castellano como lengua vehicular en las escuelas. Según explicó la ministra de Hacienda, María Jesús Montero.
El Castellano y el Gobierno frente a PP y Vox
En una rueda de prensa este martes 10 de noviembre se precisó que se tomaran en cuenta las posturas de grupos políticos como Ciudadanos y ERC.
Esto se corresponde con dar su apoyo en la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado.
Se tiene previsto que en el Congreso de los Diputados, mañana miércoles, se rechacen todas las enmiendas presentadas por los grupos políticos de PP y Vox.
La postura del Gobierno frente a Ciudadanos es diferente y aunque no se plantea una negociación en este momento. En los siguientes meses se podrán tratar las diferentes posturas para encontrar una mejor opción con respecto a las modificaciones incluidas en la normativa orgánica conocida como «Ley Celaà» que determina el uso vehicular del Castellano al mismo rango que las lenguas cooficiales.
Montero, subraya que: «será el momento donde podamos llegar a un acuerdo previo estudio detenido de esta y el resto de enmiendas que presenten los grupos».
En este sentido, se tendrán en consideración a los grupos que han accedido a negociar los Presupuestos de forma prioritaria a aquellos que se muestran en contra al presentar enmiendas en su totalidad, como lo han hecho los grupos políticos del PP, Vox, BNG, JxCAT y la CUP.
Debido a que estos grupos no conseguirán la mayoría de los votos para promover tales cambios en el uso del Castellano como lengua vehicular en las escuelas, estos serán puestos en la última fila de cara a próximas demandas.
Montero, señaló: «Este Gobierno está abierto a estudiar todas y cada una de las enmiendas que se presenten para poder llegar a acuerdos con aquellos que no han presentado enmiendas a la totalidad».
La situación del mejor socio para los presupuestos
Las formaciones políticas de ERC y Ciudadanos consideradas así mismas como auto excluyentes, son las fichas a mover en el tablero por parte del ejecutivo. Sin embargo existen divergencias sobre cuál es la mejor jugada a elegir para el Gobierno.
Unidas Podemos prefiere a ERC, mientras que para el pacto presupuestario dentro del PSOE, ciertos militantes sugieren al ejecutivo Pedro Sánchez que Ciudadanos sería «un socio muy tranquilizador».
Finalmente, mientras el Gobierno cede a negociar el uso del Castellano. La ministra Montero no ha querido señalar al favorito para sacar adelante los Presupuestos Generales del Estado.
