La crueldad que los hombres reservan para los animales siempre deja a uno mudo. Esto es lo que le pasó a este pony de Stehland llamado "Poly" que fue atendido en el último minuto.
La crueldad no conoce fronteras y enmudece a quien es espectador. Por si estamos aquí para decírselo, los espectadores de un episodio de brutal malicia y barbarie fueron los activistas de la Asociación Belga «Animaux en Péril», quienes se encontraron rescatando, en el último minuto, a un poni de Stehland llamado «Poly».
Poly, un poni desnutrido
Para los hombres que asistieron al lugar, quedó claro de inmediato que era necesaria una intervención. El dueño había tenido cuidado con el animal. Y el estado en el que lo encontraron los sorprendió.
Primero, el poni se ha liberado de su pelaje sucio y enmarañado.
En segundo lugar, era necesario intervenir en los cascos, que no se habían acortado desde hacía varios años. Poly, de hecho, apenas podía ponerse de pie.
Devolverlos a la normalidad fue difícil. Sus rescatadores incluso temieron que el pobre animal ya no pudiera volver a caminar como antes, porque los cascos, con el tiempo, también habían crecido bajo la piel. En este sentido, se utilizó una sierra para metales y unos alicates para cortar la parte sobrante.
Pero las condiciones generales de vida del animal ciertamente no parecían mejores. Cuando lo encontraron, de hecho, estaba prácticamente viviendo en su propio estiércol .
Además, un poni de su edad debería pesar alrededor de 200 kg. Poly, por otro lado, pesa solo 75. Como si fuera un perro. Piel y huesos prácticamente reducidos. Como si eso no fuera suficiente, bajo el pelaje infestado de piojos, la piel de Poly estaba adolorida, requiriendo un baño lo antes posible.
Los activistas por los derechos de los animales lo lavaron y le ofrecieron, por primera vez en su vida, un acogedor refugio. De hecho, en la clínica de la Asociación, el pobre Poly está recuperando las fuerzas perdidas, y todo lo que queda es esperar una mejora. Las dificultades que experimentó claramente lo sorprendieron mucho. «El tiempo, bajo esas torturas, debe haber parecido eterno», dijo uno de los rescatistas. Mientras tanto, el propietario está acusado de violación de derechos.
El delito de maltrato a los animales
El delito de maltrato de animales está previsto en el art. 544- ter del código penal. Quien, por crueldad o sin necesidad, cause daño a un animal o lo someta a torturas, fatiga o trabajo insoportable por sus características, es sancionado con pena privativa de libertad de 3 a 18 meses o con multa de 5 a 30 mil euros. El mismo castigo también se aplica a quienes administran sustancias prohibidas a animales. La pena aumenta si se produce la muerte del mismo animal.
Para denunciar un caso de maltrato animal, puede dirigirse a los Carabinieri, la Policía del Estado, la Policía de Hacienda, el Cuerpo Forestal o la Policía de Tránsito. El informe se puede realizar en persona o por teléfono. Además, a partir de 2010, también de forma anónima a través de un SMS. También es posible llamar al número gratuito 800253608.
Al proceder contra el maltrato animal por escrito, no se requieren sellos o formularios especiales. Un simple papel es suficiente donde puede anotar toda la información necesaria, como los testigos y sus datos personales. Luego, la denuncia debe presentarse en una Oficina de la Policía Judicial o en la Secretaría del Ministerio Público del Tribunal de Primera Instancia.
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