Volvemos a seguir con el culebrón de Antonio, Luz y Carmen en Mujeres y Hombres y Viceversa .
En el último programa, Carmen estuvo a punto de dejar el programa con un cabreo monumental y Antonio no dio pie con bola.
Al parecer el torero está muy confundido y no hay manera de que entre a matar a por alguna de sus chicas.
Si bien la semana pasad vimos la cita de 24 horas con Carmen, llega el turno de la de Luz.
Carmen asegura que Antonio le insinuó que si se iba a la cama con él, ni iría a la cita con Luz.
Otra de las pretendientas, Vanesa, ha querido que le aclarara que no había tenido sexo con Carmen.
El tronista ha contado que es cierto que él fue a la habitación de la pretendienta tras su discusión, pero que ella no le abrió la puerta.
Pues menuda justificación… ¿Y qué hubiera pasado si le llega a abrir la puerta? Lo de este torero es alucinante, y eso que se autoproclama caballero.
Empiezo a crear que piensa con algún órgano que le queda por debajo de la cintura.
A Antonio no le bastaba con estar entre dos mujeres.
Parece que ha pensado aquello de que no hay 2 sin 3 y en la cita con Vanesa, le ha plantado un beso en los morros.
Si yo soy cualquiera de las otras chicas, me levanto y ahí lo dejo con su incontinencia sexual.
Este hombre confunde lo de conocer a las chicas, con conocer su cavidad bucal…Al ver la cita, Carmen ha sentido que era la última gota que colmaba el vaso y ha anunciado que abandonaba el programa porque no se sentía con más fuerzas de ver a Antonio besuqueándose con todas y, más aún, cuando iba a ver al tronista y a Luz en su cita de 24 horas.
Luz ha sido coherente en ese punto, y le ha advertido a Antonio que si se quedaba con ella porque Carmen se iba, ella no iba a estar dispuesta.
Lo de Carmen parece que ha sido estrategia, porque sigue sentadita en su silla chupando cámara.
Antonio se ha quedado como un pasmarote, repitiendo que no entendía la reacción de sus chicas.
Pues mira, yo te lo explico: tienes un morro que te lo pisas y la bragueta demasiado suelta y no me extraña lo más mínimo que las chicas estén hasta el moño.
Para más inri, el tronista no ha querido seguir la broma de ver a Luz con un velo de novio y ni se ha levantado para recogerla en las escaleras, haciéndole un feo de dimensiones bíblicas.
Luz se ha ido hasta Córdoba para pasar las 24 horas junto a Antonio y en las imágenes se les ha visto divertidos y cómplices, aunque Luz ha estado algo más reticente a las promesas de Antonio que otras veces.
Ya le ha visto el plumero y teniendo en cuenta que la cita fue después de ver el beso con Vanesa y las confidencias de Carmen, a cualquiera se le quitan las ganas.
Vanesa le ha querido decir a Antonio que viendo esa cita, ella sentía que él ya no tenía dudas.
A lo que él ha contestado que efectivamente no tenía dudas.
Carmen se ha erizado como un gato y todos nos hemos quedado con la boca abierta -incluída Luz-, mientras Emma pedía paciencia para ver la cita íntegramente.
¿Se quedará con Luz? ¿Se ha dado cuenta de que quiere quedarse con Carmen? Sea lo que sea debe ser una decisión muy dura porque Antonio ha acabado saliendo del plató llorando.
