Los gemelos de Granjero Busca Esposa parecían necesitar un milagro para conseguir que algunas de las chicas estuviera dispuesta a aguantarlos, la cual cosa tiene un mérito inimaginable.
Pero hay personas para todo, incluso para poder interesarse por estos hombres, que cada vez que abren la boca dejan más claro que tienen más de neandertal que de hombres del siglo XXI.
Para los Vitis, las palabras educación, sensibilidad y tacto no existen.
Finalmente Ani sigue interesada en Pedro, aunque parece que siguen “como amigos” y que no se han vuelto a ver desde que se fue de la granja.
Bonita manera de empezar una relación.
A mí que esta chica me explique que ve en un hombre que se le declara y que luego muestra el mismo interés en ella que en que le pase un tren por encima.
Jesús acabó mal con todas las chicas.
Goya se fue después de la pelea entre los hermanos y él la tacha de “demasiado mayor” (¿es que no se dio cuenta de eso en la elección previa? ¿por qué la eligió entonces?).
A Yolanda, la masajista, se le declaró en bastantes ocasiones y se llevó unas calabazas de importantes dimensiones.
El hombre está resentido y entre ellos sólo queda mal rollo.
Yolanda dice que ella “quiere un hombre que tenga valores y que no tenga vicios” y él la acusa de dar “golpes bajos”, para luego añadir que era “muy mentirosa”.
Pero Jesús no pierde el tiempo, y al parecer al marcharse las chicas, llamó a Esther, un descarte de Luis, el joven maño.
El Viti ha ido incluso a Barcelona y dicen “estar conociéndose”, aunque la chica asegura que “él está enamorado, yo no”.
Vamos, que la cosa tiene pinta de que a Jesús le ha vuelto a poder el orgullo y ha preferido buscarse una amiguita que fuera al programa a reconocer el fracaso con sus chicas.
No me extraña que a estos señores sólo les aguante su señora madre, doña Vecina.
Tienen el mismo carácter encantador…
