La franquicia de los X-Men ha sido una de las más exitosas, en lo que se refiere al cine de género de superhéroes, y en el de ciencia ficcion en general los últimos años.
Antes de caer en picado con X-Men 3 y la película de Lobezno, parece que la historia de los mutantes poderosos odiados y utilizados por la humanidad tenía su público.
Y en televisión, han mutado otra vez, llamándose Alphas y siendo ubicados en la cadena SyFy.
El éxito que ha experimentado X-Men Primera Generación ha confirmado que siguen siendo uno de los temas más interesantes para el público, y la televisión no podía ser ajena al fenómeno.
Así que, tras no poder hacerse con los derechos de los célebres personajes de Marvel, surgió la posibilidad de darle una vuelta de tuerca al tema, y así surgió la serie.
No es nada novedosa, no es nada original, no es una maravilla ni se esfuerza por experimentar.
Pero resulta que está bien realizada y tiene personajes interesantes.
Y pese a no ocultar sus orígenes y su inspiración, resulta lo suficente diferente e interesante para mantenerse en antena.
La serie iba a nacer en una cadena en abierto, ya que fue presentada a NBC hace unos años.
Fue descartada porque, a priori, Heroes era más interesante.
Luego pasó a ser revisada por ABC, que quería utilizarla para reforzar la parrilla junto a Lost.
Tampoco convenció, así que Zack Penn y Michael Karnow vieron como su serie pasaba al olvido sin llegar a cuajar.
Por suerte, ese fantástico contenedor de series de género que es la cadena SyFy se fijó en ella y decidió darle una oportunidad.
En verano, en una cadena minoritaria y junto a dos de los platos fuertes de la misma, Warehouse 13 y Eureka.
La segunda no ha sobrevivido a la criba, pero Alphas y su otra compañera parece que gozan del favor del público.
Parte del éxito se puede atribuir a sus personajes.
Warren Christie y Laura Mennell son los actores que interpretan a los dos guaperas del grupo; Malik Yoba es el fuerte; Azita Ghanizada es la marginada por sus poderes y Ryan Cartwright interpreta el extraño, el rarito del grupo, y para mí, el más interesante de todos.
El actor que interpretó a uno de los becarios de Bones salió de la serie para comenzar a trabajar en su personaje, un autista que puede “ver” las emisiones radioeléctricas que fluyen por el aire y controlarlas.
Para controlarlos a todos, y ayudarles a llevar una vida normal, está el doctor Lee Rosen, interpretado por David Strathairn.
Este es el sustituto no oficial del Profesor Xavier de los X-Men, aunque a diferencia de este, no es un Alpha.
Los casos tienen todos en común la participación de uno o varios alphas malos y una organización que pretende liberarlos de la opresión de los humanos comunes.
Una vez más, la sombra de los mutantes está muy presente.
Pero aún así, ya he comentado que destaca con luz propia, y es una buena serie de entretenimiento, con buenos argumentos, efectos aceptables y guiones coherentes.
Ya llegó la season finale, el pasado 26 de septiembre, y esperaremos impacientes una segunda temporada, que se prevé tan interesante como esta primera.
