Según la investigación, Bertín Osborne recurrió a un asesor fiscal experto en entramados 'offshore' para facturar mediante Panamá y evadir impuestos.
‘El Confidencial’ ha revelado más datos sobre las trampas que hizo Bertín Osborne para eludir a Hacienda, cediendo sus derechos de contratación a una sociedad instrumental de Panamá.
Más datos sobre Bertín Osborne y su sociedad en Panamá
Según indica el diario, que tiene acceso a la investigación del Juzgado Central número 5 de la Audiencia Nacional. Bertín fijo su residencia en Luxemburgo, recurriendo a la ayuda del gestor Joaquín Arespacochaga Llópiz. Un experto en sociedades «offshore», que además fue protagonista de la trama del PSOE que desvió hasta 14 millones de euros de subvenciones públicas a la reindustralización de Cádiz.
Fue el propio cantante el que reconoció al medio anteriormente citado, que fue cliente de Arespacochaga: «Ese fue el mayor error de mi vida, hace más de 20 años: fiarme de un asesor fiscal, mientras yo vivía en Estados Unidos. Ya pagué por aquel error más de cinco millones de euros y fue juzgado por ello. Espero no tener que pasar por un segundo juicio 20 años después», afirmaba mediante una llamada de teléfono.
Bertín Osborne y su sociedad en Panamá
Los datos del presentador se encontraron en el año 2013 por la Policía Nacional, dentro del despacho del asesor, siendo remitidos al Juzgado Central de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional.
Los documentos que lo implican fijan su fecha entre los años 2000 y 2006. Por lo tanto se trataría de unos hechos ya prescritos, aunque desde Hacienda aún los siguen analizando y no se descarta que hallen más irregularidades.
La Agencia Tributaria empezó a pedir a Bertín diferentes importes derivados de su declaración de la renta durante los primeros años del siglo XXI. Una deuda que nace en la presunta derivación de varios de sus ingresos derivados de su profesión a mercantiles de su entorno que ejercían de pantalla.
En 1998 Osborne compró el 100% de las acciones de la sociedad Canterbury Operations SA, por un valor de 250.000 dólares. Pero cuando desde Hacienda se le comenzó a embargar salarios que había recibido en el año 2002, cedió a dicha sociedad sus derechos de «representación artística» con el fin de que todos sus ingresos profesionales pasaran por ahí.
En el sumario, consta que el contrato de cesión de derechos se hizo como residente de Luxemburgo, donde tuvo una vivienda entre 19998 y 2002.
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