Nueve años han tenido que pasar para que el mito del terror John Carpenter regrese al cine con la película The Ward.
Nueve años han tenido que pasar para que el mito del terror John Carpenter regrese al cine con la película The Ward. The Ward es una película del 2010, aunque tenemos que ser precisos al respecto. Tuvo su estreno mundial en el Festival Internacional de Cine de Toronto el 13 de septiembre de 2010.
The Ward de John Carpenter
Se estrenó en el Festival de Cine de Turín, el 28 de noviembre del mismo año 2010. Sin embargo, en el cine se estrenó, distribuido por BIM, el 1 de abril de 2011. Prohibido a los menores de 18 años debido a las muchas escenas violentas y salpicaduras.
En los Estados Unidos, en cambio, dada la muy fría acogida de la crítica y el muy pobre éxito de la audiencia en Europa, se limitó inmediatamente al mercado del vídeo doméstico. Saltando incluso la distribución teatral.
Desde 2001, el año en el que el cineasta se estrelló de bruces con Fantasmas de Marte de John Carpenter (un tío de lo más humilde, por lo que se ve), el director de La Cosa se ha limitado a dirigir dos capítulos de la serie para televisión Masters of Horror.
Amber Heard es la estrella principal de un film presentado con cierta decepción en el último festival de Sitges, que recibió mucho más calurosamente el film antes de verlo que después.
La película:
El film gira en torno a una joven que es ingresada en una institución psiquiátrica, donde conoce a otras chicas problemáticas.
Pronto empezarán los sucesos extraños y las desapariciones.
Los que vayan a la sala esperando alguna que otra sorpresa deben saber que The Ward sigue punto por punto el esquema de las clásicas historias de fantasmas. Lo cual no es necesariamente malo….excepto que aquí sí lo es.
El film, basado en un guion de los hermanos Shawn y Michael Rasmussen, es tópico y previsible hasta el punto que el espectador que haya visto un puñado de películas del género sabrá como acaba desde casi el principio. La puesta en escena de Carpenter tampoco lo salva, la verdad.
Una pena teniendo en cuenta que estamos hablando del cineasta de clásicos como El príncipe de las tinieblas, Starman, 1997: Rescate en Nueva York o La niebla.
